Las ciudades se preparan para los efectos del cambio climático y diseñan todo tipo de estrategias para minimizar el aporte de las actividades locales a este fenómeno. Rosario no se queda atrás y a través de una mesa interdisciplinaria compuesta por representantes de la Secretaría de Ambiente y Espacio Público, Ente de la Movilidad, Universidad Católica Argentina, Universidad Tecnológica Nacional, Universidad Nacional de Rosario, Laboratorio de Eficiencia Energética, Sustentabilidad y Cambio Climático y el Instituto de Mecánica Aplicada a las Estructuras (IMAE), elaboraron un Inventario de Gases de Efecto Invernadero de la ciudad que identifica y contabiliza los gases de efecto invernadero emitidos a la atmósfera en un año calendario.

Así, en el Palacio Municipal, hoy se presentó el documento que contribuirá a elaborar un plan de acción para disminuir el impacto ambiental que producen tales gases. Este documento permite conocer los sectores de mayor contribución, con sus emisiones, al cambio climático.

Contar con este material que clasifica y contabiliza los gases de efecto invernadero, permite conocer el estado de situación de la ciudad frente a esta problemática y definir políticas públicas para prevenir y reducir el aporte local a esta problemática global.

Como fruto de este trabajo, en el 2018 la Secretaría de Ambiente y Espacio Público logró acceder a una oportunidad de financiamiento de la organización internacional ICLEI-Gobiernos locales para la sostenibilidad- para elaborar durante este año el Plan de Acción Climática de la ciudad que desarrolle estrategias para reducir emisiones y a su vez para adaptarse a los cambios en el clima. 

Las acciones climáticas buscan aportar a la solución de un problema planetario, como lo es el cambio climático, pero fundamentalmente permiten mejorar el ambiente y la calidad de vida en las ciudades.