Tres sospechosos de integrar una banda “multipropósito”, dos de ellos alojados en la cárcel de Piñero, fueron imputados en Rosario por la presunta conformación de una asociación ilícita que cometía robos, amenazas y usurpaciones.

El fiscal que investiga a la banda, Federico Rébola, llevó a audiencia imputativa a tres presuntos miembros de la organización, que estaría integrada por más personas que aún no fueron identificadas.

Dos de los acusados, entre ellos el que es considerado organizador de la asociación ilícita, están detenidos en la Unidad Penitenciaria 11 de Piñero, cercana a Rosario.

Según la investigación fiscal, la banda –que era comandada por teléfono desde la cárcel– tenía múltiples propósitos delictivos: extorsiones; robos de vehículos y a personas; estafas a través de Facebook; amenazas; usurpaciones de viviendas; robo a comercios; escruches; ataques armados a lugares de venta de estupefacientes.

Según informó este sábado el Ministerio Público de la Acusación (MPA), los acusados fueron identificados como Maximiliano B., considerado jefe de la banda y detenido en la UP11; Alexis S., una suerte de asistente que ahora está preso en la misma cárcel; y Lucas R., quien articulaba extramuros las acciones que eran ordenadas desde el penal.

Rébola explicó que Lucas R. “se comunicaba diariamente utilizando una línea de teléfono celular a su nombre con otra persona que en el momento de los hechos también encontraba en libertad”, que era Alexis S., y con el jefe Maximiliano N. “a los fines de organizar la comisión de delitos”.

De acuerdo al fiscal, Maximiliano N. es el “jefe de la organización” y quien “ponía a disposición armas utilizadas por Lucas R. y otros para cometer los hechos”, a la vez que “también proveía recursos económicos y/o vehículos para la realización de los mismos”.

El preso, además, pagaba los “trabajos” que encargaba a sus cómplices fuera de la cárcel, indicó la acusación.

Alexis S., por su parte, habría mantenido “comunicaciones diarias con Lucas R.” para pasarle “datos de potenciales víctimas para la concreción de hechos ilícitos”.

En cuanto a Lucas R., el fiscal también le atribuyó dos hechos precisos. Uno fue un intento de usurpación de una vivienda ocurrido el 21 de julio pasado en la zona sur de Rosario, al ofrecerle dinero a la dueña de la propiedad mientras le exhibía un arma de fuego, detallaron voceros de la causa.

El otro hecho ocurrió el 2 de agosto último en calle Olegario Víctor Andrade al 1.100, cuando el acusado abordó con un arma a un hombre que había estacionado su vehículo y se lo robó, aunque por un desperfecto mecánico debió abandonarlo un rato después.

Tras el detalle de los hechos imputados y la exhibición de la evidencia, la jueza de la audiencia, Silvia Castelli, les dictó prisión preventiva por dos años a los tres involucrados.