Rodrigo Sabarsky es paciente oncológico. En 2016, le extirparon un tumor, junto al riñón izquierdo. El proceso de recuperación fue exitoso y la operación quedó en la historia. Pero en los últimos estudios que se realizó, las noticias no fueron buenas.
Su médico oncológico de cabecera, le dijo que «aparecieron distintas glándulas cancerígenas en diferentes partes del cuerpo, tanto en la tercer vertebra, en el pulmón, en el mediastino y en el otro riñón que me queda«.
Sabarsky explicó que el problema surge debido a que «mi médico se juntó con una serie de oncólogos y detectaron que la medicación que más se adaptaba, es la que él me recetó. Hizo todo un descargo de que porque motivo me daba esa medicación y se le pasó la medicación al jefe de Galeno. Ellos vieron complicaciones y no se llegó a un buen fin«.
La situación es más compleja aún. El joven esposo y padre de dos hijas, debe hacerse una sesión de quimioterapia, y necesita en modo urgente, que Galeno le entregue la medicación que ya fue amparada por un dictamen judicial en primera instancia.
«Nosotros estamos desde principio de julio, justamente, luchando contra la obra social, porque lo que ellos plantean es que hay otra medicación que puede llegar a ser tan efectiva como esta para el tratamiento de Rodrigo y si de aquí a un par de meses no funcionaran con la medicación que ellos sugieren, que no la que pide el oncólogo, recién estarían autorizando la medicación de primera linea», aseveró Melina, esposa de Sabarsky.
La pareja presentó «un recurso de amparo, porque justamente el oncólogo es quien decide la medicación a tratar y es quien considera cual es la medicación que necesita Rodrigo en estos momentos para poder curarse y que no tiene tiempo para ver si hace efecto», y desde el día viernes «Galeno está obligado a dar la medicación».
Melina mencionó que la urgencia es fundamental para su esposo, ya que «mañana tenemos una quimioterapia programada». Hacerse cargo a nivel particular de dichas sesiones conlleva un gasto imposible para cualquier familia: «en forma particular, nos sale 550 mil pesos. Forma parte de un tratamiento con pastillas que sale 380 mil pesos. A partir de mañana necesitamos esa medicación sí o sí«, concluyó la esposa del paciente oncológico de urgencia.
