Este viernes a la noche se llevó adelante un operativo de tránsito con el resultado de 25 remisiones al depósito municipal. Unas 9 unidades fueron sancionadas por documentación irregular, el resto porque los conductores mantenían niveles de alcohol en sangre no permitidos para la conducción.

La Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana llevó a cabo este viernes a la noche un operativo de tránsito que tuvo como resultado un total de 25 vehículos remitidos al corralón municipal. Los traslados se concretaron en el marco de un procedimiento preventivo llevado a cabo en las zonas gastronómicas y de entretenimiento más concurridas por los ciudadanos.

El secretario Pablo Seghezzo confirmó que este viernes a la noche y durante la madrugada de hoy, se llevó a cabo un “extensivo” procedimiento de control vehicular con asistencia de personal de la Unidad Regional II de la Policía de Santa Fe. “Como hacemos cada fin de semana, mantuvimos una fuerte presencia preventiva en los lugares de la ciudad que son elegidos para el esparcimiento nocturno, a fin de garantizar la seguridad vial”, señaló Seghezzo.

De acuerdo a lo que precisó, se remitieron al depósito municipal 24 autos y una moto. De ese total, 9 fueron trasladados porque sus conductores no tenían al día los documentos requeridos para el desplazamiento urbano. “En tanto –indicó el secretario- unos 16 vehículos fueron sancionados porque se les practicaron test de alcoholemia a los conductores y los resultados fueron positivos”.

Cabe destacar que el nivel de alcohol en sangre más elevado fue de 1.20, cuando la norma vigente establece un mínimo de 0.5 gramos permitidos. Los conductores fueron sancionados con el traslado de sus vehículos al corralón.

“Se acerca el fin de este 2015 y seguimos esforzándonos en mejorar los controles preventivos, reforzando nuestra presencia a fin de promover una permanencia y una circulación urbana ajustada a las leyes”, sostuvo y remarcó: “Vemos con entusiasmo que nuestras acciones promueven un cambio positivo en la conducta al volante de la que creemos, debemos eliminar el consumo de alcohol. Ese es un límite que ya no podemos pasar ni vamos a tolerar como Estado”.