Semanas atrás, la Cámara Federal de Apelaciones de Rosario revocó una medida cautelar otorgada a siete mujeres que las autorizaba a cultivar cannabis para producir el aceite medicinal que sus hijos necesitan y que les cambió la vida a los niños. Este lunes, las mujeres nucleadas en la agrupación «Madres que se Plantan» volvieron a la Justicia para presentar un recurso extraordinario para que esa medida cautelar quede en pie hasta que se resuelva la cuestión de fondo.

En dialogo con Conclusión, Carina Prieto, una de las siete madres que empezaron esta batalla judicial, explicó que la presentación que hicieron este lunes es para que la Cámara vuelva para atrás con esa medida hasta que la Corte Suprema dirima la cuestión. «El punto al que nos referimos es a la fabricación del aceite que nuestros niños necesitan. La presentación va en ese sentido, que la cautelar siga en pie hasta que llegue a la Corte Suprema para no suspender los tratamientos», detalló la mujer poco antes de ingresar a los Tribunales Federales.

A pesar de que la jueza federal Sylvia Aramberri había autorizado a las «Madres que se plantan» a fabricar el aceite medicinal , con la colaboración de la facultad de Bioquímica que se encarga de la cromatización del mismo y el correspondiente seguimiento médico, el Estado apeló la decisión de la magistrada y, sobre esa apelación, la Cámara Federal resolvió sostener la autorización para el autocultivo pero no para la fabricación del medicamento.

«Esto nos pone en una situación de ilegalidad total», manifestaron las «Madres que se plantan». «Además, es casi una burla, porque para qué vamos a querer plantar nosotras sino es para darle a nuestros hijos la medicina que necesitan».

«La presentación de hoy es para que se vuelva a incluir ese punto, la fabricación del aceite, hasta que se dirima el tema en la Corte Suprema». «Sería muy importante porque la resolución de la Corte puede llevar años».

«Es obvio que ninguna de de las madres va a dejar de darle el aceite a sus hijos y entonces quedamos muy vulnerables ante la Justicia, más vulnerables que nunca porque antes lo hacíamos de forma anónima e invisible, hoy somos caras visibles y la Justicia sabe que lo estamos haciendo.», enfatizó Prieto quien además apuntó que «si dentro de un mes quieren verificar si estamos cumpliendo los requerimientos y ordenan análisis vamos a quedar en la situación de suministrarle drogas a los niños ilegalmente».

En ese sentido, desde Madres que se Plantan expresaron que lo más triste es que el cuestionamiento de la Justicia no tiene que ver con el hecho de que el aciete les haga bien o mal, sino que lo que se discute es «quien lo va a suminitrar, laboratorios, empresas privadas, ese tipo de cosas».

«En lo personal yo ya no tengo vuelta atrás, afirmó Prieto en forma contundente. «Si el precio es la libertad, ese será, yo no puedo suspenderle el aceite a mi hijo hasta que se arme un protocolo para ver si sirve, porque tengo toda la evidencia en mi casa. Y la pongo a disposición, con todo lo que eso implica y duele, los desafío a que le hagan una cámara Gesell a mi hijo con todos los estudios en la mano».