Una médica y su esposo fueron estafados tras un llamado de unos presuntos trabajadores del Banco Galicia. La pareja creyó que era un trámite común y corriente y les sacaron un crédito por más de 200 mil pesos. Además, le vaciaron la cuenta.

“Nos agarraron cansados, después de todo un día de guardia”, expresó Marianela Fernández antes de empezar su relato.

Según contó la médica, todo comenzó sábado 5 por la tarde cuando recibió un llamado de parte del Banco Galicia en el cual le solicitaron corroborar sus datos. Luego de ello, y con todos sus datos, les mandaron un mail “por parte del banco” y les pidieron que ingresen un número.

Cansada y “con la guardia baja” la médica se confió y le pasaron el número. Automáticamente, ya con desconfianza, la pareja ingresó al “home banking” y se encontraron que les habían sacado un crédito de 215 mil pesos. No conforme con eso, también les robaron la totalidad del sueldo que tenían en la cuenta.

“A todo esto nos bloquearon la cuenta. El domingo estuvimos una incertidumbre tremenda, la pasamos mal, tenía que hacer una guardia y tuve que postergarla porque estaba muy nerviosa. Ayer nos vinimos hasta el banco y solo después de hacer un lío bárbaro logramos que no9s atienda el Gerente”, relató Maraianela y remarcó que “les restaron importancia al tema”.

“Nos dijeron que tenían que mandar el reclamo a la Casa Central de Buenos Aires y hasta se atrevieron a desconfiar de nosotros”, añadió.

En tanto, la mujer detalló que hizo la denuncia en la Comisaría 5° y en un Centro Territorial de Denuncias para que el reclamo llegue a fiscalía.

“Hablamos con un abogado porque necesitamos una solución a esto. El mes que viene va a llegar la primer cuota y no tenemos nada que nos respalde”, explicó.

Asimismo, aseguró que va a pedir explicaciones sobre por qué otorgan créditos sin preguntar ni averiguar nada.

“Nos sacaron 215 mil pesos sin averiguar anda, sin preguntar. Es ilógico”, enfatizó.

Lamentablemente, Marianela no es la única víctima de estafa telefónica. Este martes, un grupo de damnificados –también por el banco- se juntaron en la esquina de Sarmiento y Santa Fe para dar a conocer lo que está sucediendo con esta nueva modalidad que es cada día menos perceptible.