La bandera wiphala, símbolo patrio de Bolivia comenzó a flamear en el mástil escolta del Monumento Nacional a la Bandera para expresar la solidaridad de Rosario hacia el pueblo boliviano, que actualmente padece la represión del golpe de Estado al presidente Evo Morales.
«Esta solidaridad es muy importante, ya que nuestra wiphala fue quemada y pisoteada. Representa la unidad de los pueblos y las diferentes culturas. Es un símbolo patrio, al igual que nuestra bandera boliviana roja, amarilla y verde», explicó la cónsul de Bolivia, Esther Torrico Peña, en diálogo con Conclusión.
Al ser consultada por la actual situación que atraviesa el país vecino, Torrico Peña advirtió que «después de haberse suscitado el golpe de Estado, la gente siguió en las calles», al mismo tiempo, recordó las victimas de la brutal represión llevada adelante por el gobierno ilegítimo de Jeanine Áñez: «Queremos informar que hay 34 fallecidos y 1.000 heridos a punta de bala. Hay un decreto que ha sido repudiado a nivel internacional que da permiso para reprimir y balear al pueblo boliviano».
La cónsul de Bolivia también destacó que «la ley aprobada de emergencia, que llama a elecciones inmediatas» servirá para pacificar la coyuntura política y social del país.
Por otra parte, al momento de hablar de los bolivianos que actualmente residen en la Argentina, y particularmente en Rosario, Torrico Peña explicó que los ve «muy preocupados por sus familiares, ya que muchos de ellos estuvieron en marchas y concentraciones y han sido reprimidos».
Según el proyecto aprobado en el Concejo Municipal de Rosario, la whipala flameará en el Monumento Nacional a la Bandera hasta el 2 de diciembre.
