A las cero horas de este viernes comenzó a aplicarse en forma efectiva el decreto presidencial que determinó cuarentena general hasta el 31 de marzo. Con este escenario, las sucursales bancarias de todo el país permanecerán cerradas y sólo se mantendrán funcionando con normalidad los cajeros automáticos para poder operar con banca eletrónica. Además los bancos deberán seguir prestando servicios a los usuarios en forma remota, en el marco de la cuarentena general.

En ese contexto se vivieron, en algunos puntos de la ciudad, momentos de tensión entre efectivos policiales y ciudadanos que concurrieron a las puertas de algunos bancos públicos ya que en el día de hoy les correspondía cobrar sus sueldos y debían hacerlo por ventanilla ya que, por sus particulares y precarias condiciones laborales, no cobran con tarjetas de débito.

Sólo banca eletrónica

Los días 23 y 24 de marzo son feriados y ya estaba preestablecido que no habría actividad bancaria. En tanto, miércoles, jueves y viernes de la próxima semana serán declarados «días inactivos». Durante esas jornadas operará la banca electrónica y el mercado cambiario, pero no habrá clearing de cheques.  

Durante esos tres días se mantedrá en funcionamiento el Tesoro del Banco Central, lo que permitirá asegurar la carga de los cajeros automáticos. Cada banco es responsable de abastecer los cajeros de sus sucursales y las transportadoras de caudales lo harán con los que esté  ubicados fuera de ellas.

En tanto, el Banco Central de la República Argentina publicó este jueves la resolución Nº 117 a través de la cual declaró días inhabiles las jornadas comprendidas entre el 16 y el 31 de marzo de 2020 para las actuaciones cambiarias y financieras  instruidas en los términos de las Leyes del Régimen Penal Cambiario N° 19.359 y de Entidades Financieras N° 21.526.

Además, el BCRA deberá publicar en las próximas horas la normativa especifica para otras operaciones financieras.

La dura realidad

Este jueves, en horas de la noche, el presidente Alberto Fernández anunció la puesta en vigencia del decreto Nº297/2020 a partir del cual se dispuso la cuarentena general y obligatoria.

Si bien el mismo contempla algunas excepciones, la finalidad es vaciar las calles y evitar la circulación de personas en todo el país, para evitar la expansión de virus y el contagio

Sin embargo, hay puntos que no fueron contemplados. Uno de ellos es la dura realidad de las personas que trabajan por su cuenta, o en negro o con una situación laboral precaria. Este último caso se vio reflejado este viernes en la mañana en las puertas de algunos bancos de la ciudad .

Uno de los conflictos se desató frente a la sucursal del Banco Provincial de Santa Fe ubicada en Entre Ríos y Santa Fe, donde cobran empleados de la provincia. Ante la larga cola que se formó a sus puertas, efectivos policiales se acercaron para decirle a la gente que no se amontone y que guardara distancia y a controlar que los que estaban allí tuvieran su correspondiente tarjeta de débito. Sin embargo, se encontraron con un importante grupo de personas que trabajan para la provincia de Santa Fe, pero que al ser contratados, cobran por ventanilla y no por cajero.

En el lugar se vivieron momentos de tensión entre la policía que intentaba desalojar el lugar y la gente que se negaba a irse porque su único medio de supervivencia para los próximos días estaba detrás de las puertas del banco.

Finalmente, el lugar fue desalojado y se esperan respuestas oficiales para encontrar una solución.