Cinco rugbiers del club Gimnasia y Esgrima de Rosario (GER) fueron imputados este miércoles por irrumpir a los golpes en un boliche ocasionando graves lesiones tanto a custodios del local bailable así como a otro grupo de jovenes que se encontraba en el lugar.

El hecho ocurrió en la madrugada del 4 de noviembre pasado, cuando Lucio C. (24); Emiliano S.(23); Andrés S. (24); Manuel C. (25) y Luciano F. (27), entraron a un local bailable del parque España y agredieron con golpes de puños y patadas a varias personas, entre ellos custodios y otros empleados del lugar.

Tres de las víctimas, lesionadas gravemente, fueron aceptadas como querellantes en la causa. Fiscalía remarcó el inexplicable grado de violencia que ejercieron los acusados y elevará el caso al tribunal de disciplina de la Unión Argentina de Rugby (UAR).

Luego de una ardua investigación, la fiscal Cecilia Brindisi, de la Unidad de Investigación y Juicio, acusó formalmente del delito de «lesiones dolosas leves calificada por el concurso premeditado de dos o mas personas» a los «gerontes» por los graves incidentes registrados en el boliche ubicado Sarmiento y el Río.

Según la reconstrucción elaborada en la investigación a partir de testimonios de víctimas, testigos y registros fílmicos, el grupo comenzó los disturbios agrediendo a golpes a otros jóvenes, identificados como L. V.; A. L. Y M. Z., que estaban dentro del local.

Acto seguido intervino personal de seguridad del lugar, no obstante lo cual los rugbiers intensificaron las agresiones, ahora también contra los custodios.

Los rugbiers emprendieron retirada avanzando por calle Sarmiento, pero después de segundos regresaron, amenazaron a otro custodio y golpearon a una persona que trabaja en relaciones públicas de la discoteca. Tres víctimas debieron ser atendidas en el Sanatorio Británico y el hecho fue denunciado formalmente en la comisaría 3º.

Avance de la  investigación

La fiscal Brindisi efectivizó la presentación de las evidencias, que implicaban el acta policial, testimonios de las seis víctimas y testigos presenciales, videos de las cámaras de seguridad del local bailable y los informes médicos donde se detallan las lesiones.

Al tratarse la medida cautelar, la fiscal acordó la libertad con una serie de reglas de conducta: firma semanal ante la Oficina de Gestión Judicial (OGJ), prohibición de salir del país, de concurrir al boliche donde se generaron los incidentes, de comunicarse por cualquier medio con las víctimas y una caución real no inferior a los 1.000 pesos.

Tras aceptar el juez José Luis Suárez, la querella, sólo adhirió a la prohibición de acercamiento y de concurrir al establecimiento donde se desató la golpiza.

Los abogados defensores rechazaron la cronología y ocurrencia del hecho aduciendo que «la descripción hecha por el MPA fue confusa».

Además cuestionaron a la fiscal «por estigmatizar» a los imputados con la denominación de «rugbiers».

Poniendo en consideración la responsabilidad y conciencia del uso indebido de violencia que deben tener los deportistas que practican rugby, el juez Suárez convalidó la acusación bajo el encuadre que escogió la Fiscalía.

El magistrado dispuso como alternativa a la prisión preventiva de los cinco imputados la presentación quincenal ante la OGJ, la prohibición de ausentarse del domicilio por mas de un mes (antes deben pedir autorización al tribunal) de concurrir al boliche y de todo tipo de contacto con las víctimas por cualquier medio. Y les fijó a cada uno una caución real de 3.000 pesos.