El candidato a presidente del Frente Despertar, José Luis Espert, visitó este martes la ciudad de Rosario, en el tramo final de la campaña de cara a las elecciones del próximo domingo y aseguró encontrarse «feliz» por estar «a punto de competir después de tantos contratiempos».
«Hicieron de todo para vaciarnos las listas, no lo consiguieron, y lo más importante, hacia adelante hemos planteado una bandera para seguir en 2021 y 2023, para que los jóvenes se queden en el país, una esperanza para ellos y la gente de bien», sostuvo el economista liberal.
Consultado por Conclusión sobre su deseo de representar una alternativa liberalista en el país, algo que Mauricio Macri finalmente no logró consolidar por la naturaleza de la alianza que lo llevó al poder, consideró que el actual presidente es «enemigo del liberalismo«.
Macri nunca fue liberal. Por constitución no puede serlo, es hijo de un empresario prebendario y corrupto de Argentina.
«Macri nunca quiso ser liberal, nunca lo fue. Por constitución no puede serlo, es hijo de un empresario prebendario y corrupto de Argentina. Por culpa del desastre económico en el cual ha terminado su gobierno, hay mucha gente -confundida- que piensa y cree que el liberalismo ha generado esta crisis», expresó.
Y añadió: «La corrupción no tiene clase social. Argentina es una sociedad gobernada por empresarios prebendarios, corruptos, chantas y delincuentes«.
El escenario más probable es que gane Alberto Fernández.
Respecto a la posibilidad de que haya un escenario de balotaje a partir de los comicios del domingo, Espert lo «imagina» lejano: «El escenario más probable es que gane Alberto Fernández».
Por su parte, ante esa posibilidad, su compañero de fórmula, Luis Rosales, pidió «a los rosarinos y santafesinos» que piensen «como ir conformando la mejor oposición».
«Lamentablemente, aunque no nos guste, es así. Por culpa de Macri, lo más probable es que vuelva el kirchnerismo, hay que armar la mejor oposición, que sin dudas es Despertar con José Luis Espert», dijo Rosales, que acompañó al aspirante presidencial, junto al candidato a diputado nacional de ese espacio, Gonzalo Mansilla de Souza.
Si Alberto Fernández va a abrazar el programa económico de la Ucedé o el Partido Libertario, con todo gusto apoyaremos.
Ante la pregunta de Conclusión por la todavía gaseosa convocatoria al diálogo planteada por el candidato del Frente de Todos, Alberto Fernández, Espert declaró: «Si va a ser así, no tengo idea. Si fuera así, en primer lugar le doy la bienvenida, pero no vamos a consensuar cualquier cosa».
«Tenemos claro qué es lo que Argentina tiene que hacer para cortar con la decadencia. Si Alberto va a abrazar el programa económico de la Ucedé o el Partido Libertario, es decir las cosas que hacen los países de bien, con todo gusto apoyaremos. Ahora consensuar un acuerdo de precios, no», agregó el economista, rodeado de sus jóvenes simpatizantes.
En ese sentido, para salir de la actual crisis económica, Espert reiteró la necesidad de «crecer», a lo que sumó «bajar la tasa de inflación» y una negativa profunda a instaurar más paliativos sociales.
Ojalá Argentina tuviera los problemas que tiene Chile. Cada 7 años una crisis en la que se prende fuego el país y la pobreza estalla.
«Dos tercios del gasto público son planes, más no podemos hacer. Esa plata son impuestos que salen de la gente, y los que pagan impuestos no son marcianos. Que algún político se achique asesores que tiene, etcétera. Basta de aumentar el gasto, hay que hacer otras cosas, crecer, bajar la tasa de inflación», aseguró.
Por último, el candidato del Frente Despertar se refirió a la crisis política y social en Chile, y si bien afirmó que en el país trasandino «hay problemas», señaló una «clara intervención de Venezuela y el gobierno de Cuba, como denunció la OEA».
«Algo responsabilizo a (presidente chileno, Sebastián) Piñera, pero no para justificar esto que está pasando. Ojalá Argentina tuviera los problemas que tiene Chile. Argentina tiene cada 7 años una crisis en la que se prende fuego el país y la pobreza estalla 15 o 20 puntos. Hace 30 años teníamos dos veces el ingreso per cápita de ellos y hoy tienen 20 % más que nosotros. Más que una crítica a la política económica del gobierno de Chile, la crítica es a los gobiernos cobardes de América Latina, que nunca quisieron sacar a (presidente venezolano, Nicolás) Maduro del poder», concluyó Espert.
