El debate sobre el descanso dominical sigue candente en la ciudad y sumando adeptos. En este contexto fue que Sabino Álvarez, a diferencia de otros supermercadistas, se mostró a favor de la iniciativa y quiso llegar más lejos al proponer incluir a los pequeños comercios. Consideró la necesidad de descanso para todos y descartó que signifique una pérdida económica para los empresarios.
Consultado sobre la nueva ley, Álvarez dijo: “Pienso que los domingos hay que cerrar, son para descansar”, y remarcó: “Estamos de acuerdo con el cierre y lo mejor sería extenderlo a los locales de 100 metros cuadrados, mientras que en los negocios chicos pueden atender los dueños”.
Muchos fueron los que adhirieron, durante el tratamiento del descanso dominical, a la idea de que el consumo en esos días responde a una cuestión de costumbre. El empresario, de La Gallega, no se quedó atrás y en esa dirección alegó: “La gente se va a acostumbrar a comprar viernes y sábado y el domingo descansamos todos”.
En otro tramo de la entrevista se refirió a que muchos empleados llegan al día domingo muy cansados: “Los más chicos se duermen en las cajas. Yo los veo, no manejo mis supermercados desde la cama”, advirtió.
Por último, admitió que abrir los días domingos resulta caro para el propietario que cumple con las normativas y paga en tiempo y forma a sus empleados.
