El colegio Emilio Ortiz Grognet -ubicado en Rondeau al 2770, en el norte de Rosario- cumple 30 años y lo festeja con actividades deportivas y solidarias para visibilizar el rol social de la institución. En el marco de los festejos, el próximo domingo habrá una maratón de 2 y 5 kilómetros, y quienes participen en ella deberán contribuir con un alimento no perecedero, que será donado al Comedor Dorita.

Para conocer más sobre la actividad, Conclusión dialogó con directora del colegio, Betiana Dinorfo, y con la secretaria, Antonela Runco, quienes adelantaron: “Estamos cumpliendo treinta años, y decidimos festejarlo con una maratón, no solo para agasajarnos de manera interna, sino también con un fin solidario, porque estamos recaudando elementos no perecederos para el comedor Dorita, que está ubicado en Travesía, casi llegando a Sorrento”.

Cuando el colegio cumplió 25 años había organizado una maratón más pequeña, pero para celebrar las tres décadas decidieron ampliar la actividad con varios fines: apelar la solidaridad, visibilizar la actividad de la escuela y fomentar el deporte en los niños y adolescentes.

Antonela Runco y Betiana Dinorfo

“Nos hemos sorprendido de los runners que tenemos en Rosario. Hemos superado las expectativas, pensábamos en algo más pequeño, pero la verdad que hoy en día siguen llamándonos para inscribirse, pero por una cuestión organizativa tuvimos que dar por cerrada la inscripción”, indicaron las trabajadoras del colegio Emilio Ortiz Grognet, quienes recordaron que “aquellos que van a correr también deben traer un alimento no perecedero”.

 

La maratón se realizará el próximo domingo 28 de agosto, bajo el siguiente cronograma:

• A las 9 partirán los niños de jardín y nivel inicial, que realizarán un recorrido de 400 metros.

• Luego será el turno de los dos kilómetros, que largarán desde el Barquito, con dirección hasta Avellaneda, y regresarán al punto de partida.

• Simultáneamente largarán los corredores de cinco kilómetros, quienes saldrán desde el Barquito hasta los Silos Davis, para retornar al punto de partida.

“Nosotros abrimos las puertas de la zona norte, somos una parte del Cordón Industrial, así que está bueno visibilizar al colegio con una actividad solidaria para un montón de chicos que la necesitan”, concluyeron las organizadoras.