Santa Catalina, la obra de arte valuada en alrededor de un millón y medio de dólares que fuera robada del Museo Municipal de Arte Decorativo Firma y Odilo Estévez hace 35 años, fue restituida a su lugar tras una extensa investigación realizada a nivel internacional.

El cuadro del pintor español Bartolomé Murillo data del siglo XVIII  y fue recuperado en Urugauay por Interpol, después de que su sustracción se haya realizado junto a otras tres pinturas luego de que los malhechores ataran y amordazaran a los empleados del lugar en el año 1983.

Durante el acto de restitución, la intendenta Monica Feín expresó su alegría al decir: “Festejamos 35 años de recuperación de la democracia cuando nos enteramos que la habían encontrado en Uruguay, con lo que fue un equipo nuestro junto junto con Interpol y pudimos identificarlo”.

Además, la titular del Palacio de los Leones agradeció al equipo técnico que viajó a la Banda Oriental a realizar las pruebas que permitieron “ver que era nuestro Murillo y que por fin pudo volver al Museo Estévez”.

También Fein mencionó que haber recuperado dicho patrimonio «es importante para la ciudad» para enseguida agregar:  «Nos pone muy felices por no haber bajado los brazos y haber preservado el cuadro y poder decir que la ciudad recupera un valor de una obra extraordinaria”.

Por su parte, el secretario de Cultura Guillermo Ríos, le dijo a Conclusión que las noticias de la aparición del cuadro fue a mediados de octubre “cuando la división especializada en arte robado de Interpol tuvo noticias de que la banda que lo tenía estaba en las afueras de Montevideo”.

“Cuando nos avisan que habían capturado la banda y que habían dado con el cuadro, viajamos con la directora del museo y una especialista de Icram, Gabriela Valdomar, a cerciorar que ese cuadro que estaba allí, era el que correspondía al patrimonio robado” continuo Ríos.

Al consultarle sobre la importancia de esta recuperación artística, el secretario de Cultura expresó que “es recuperar la memoria de la ciudad, recuperar parte del patrimonio, recuperar la identidad de estas familias que fueron parte de la ciudad y que donaron este patrimonio no solo para la ciudad sino para el país”.

Finalmente, Mónica Fein mencionó que cuando el cuadro sea restaurado “se hará una fiesta para homenajear a todos los artistas y coleccionistas que suman al patrimonio público” de la ciudad de Rosario.