Las nuevas app como Rappi y Glovo llegaron a Rosario con un cambio en las formas de consumo de la gente, pero también con «precarización laboral», según el sindicato que agrupa a quienes trasladan los diferentes artículos a los compradores.
En ese sentido, el sindicato de Cadetes Rosario, mantuvo una reunión con empleados de estas empresas, que en principio no tienen lugar físico o siquiera un rostro al cual dirigirse para efectuar alguna consulta o reclamo. Son aproximadamente 300 empleados que se encuentran en esta situación: unos 150 en Rappi y otros 150 en Glovo.
Conclusión dialogó con Gustavo Yedro, secretario general del sindicato de Cadetes, quien se mostró atento y preocupado por “la situación que están atravesando los trabajadores de estas empresas que funcionan a través de un celular”. Además, comentó que “la situación se va agudizando desde que nosotros empezamos a denunciar la llegada de estas aplicaciones y el mecanismo perverso que tiene de contratar empleados”.
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“Perverso porque hay un abuso tremendo utilizando la necesidad del trabajo, que hoy el trabajo escasea y cada vez vamos bien más gente desocupada. En ese sentido esta gente se está abusando de esa situación”, continuó Yedro. Y sintetizó: «Hay una precariedad extrema».
En cuanto a cuáles son los derechos vulnerados a los trabajadores, Yedro no dudó: “Absolutamente todos”. “No cumplen con ningún articulado de la ley de contratos de trabajo. Primero porque los obligan a hacerse monotributistas y el monotributista es un trabajador autónomo e independiente, que no es en este caso. En este caso están condicionados a los viajes que le da la empresa y están condicionados al uso de la aplicación de la empresa, a la vestimenta de la empresa, entre otras cuestiones”, se explayó Yedro.
“Les paga la empresa, tanto Rappi como Glovo. Entonces eso de autonomía o independencia para ser monotributistas carece de todo tipo de argumentos. Los pibes que trabajan ahí son empleados, precarizados, de Glovo y de Rappi”, explicó el representantes de los cadetes.
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Yedro contó que “nosotros venimos trabajando ya desde hace un tiempo, movilizándonos frente a las oficinas que momentáneamente ocupan estas empresas, venimos denunciando públicamente, apenas vimos la llegada de estas empresas hemos presentado un proyecto de ordenanzas para que las trate el Concejo y las obligue a tener un domicilio legal a estas empresas aquí en la ciudad de Rosario como nos dice la ordenanza”.
La normativa 7042 establece que cualquier empresa que ofrezca servicios de cadetería o de mensajería delibery debe presentar un domicilio legal o fiscal en la ciudad.
Este jueves, el edil Eduado Toniolli presentó en el Palacio Municipal una denuncia administrativa contra Glovo y Rappi por no contar con habilitación local.
Además, desde el Concejo ya habían pedido respuestas, motivadas por reclamos de distintos gremios de la ciudad.
