Denuncian irregularidades en la construcción de un edificio de Mendoza y Riccheri
"Tenemos conflictos permanentes con esta obra que lleva adelante una cooperativa, porque subcontrata y hace todo de manera precaria", dijo a Conclusión Sixto Irrazabal, titular de la Uocra Rosario.
- Ciudad
- Nov 16, 2018
La construcción de un edificio en la esquina de Mendoza y Riccheri, se encuentra totalmente frenada y, a partir de esto, denuncian irregularidades con sus trabajadores: «Tenemos conflictos permanentes con esta obra que lleva adelante una cooperativa».
«Esta obra tiene más de cuatro años y tenemos conflictos casi permanentes, porque es una cooperativa la que está llevando a cabo el desarrollo, pero el problema es que subcontrata de manera precaria, por lo que tiene parada la obra», dijo a Conclusión Sixto Irrazabal.
El titular de la Uocra Rosario explicó que «en todo este tiempo, la obra ya tiene entre 8 y 10 inspecciones. La semana pasada hicimos dos y ayer volvimos porque había trabajadores a los que no se les pagaba, no tenían ropa, baño, comedor, duchas ni nada».
«La obra está avanzada y es grande, tiene espacio como para que se hagan los vestuarios para los compañeros, pero tenían un solo baño para 23 trabajadores y otros cuatro que estaban trabajando en negro. Es decir que se mueven alrededor de 30 personas en la obra con un solo baño químico», agregó.
El sindicalista insistió en que «no tenían ropa ni ninguna clase de elementos de seguridad. El tema de los pagos también era complicado, porque no se les pagaba ni los feriados, ni el aguinaldo. Tiene todo muy mal, tratamos de comunicarnos muchas veces y lo que hacen es parar la obra quince días para que la gente se enoje con el gremio».
«Hoy en día fuimos con el Ministerio para dejar asentado la denuncia y nos encontramos con que estaban con candados y alarmas en la obra, por lo que no pudieron ingresar los trabajadores», dijo Irrazabal.
El secretario general de la Uocra, seccional Rosario, detalló: «La cooperativa no tiene trabajadores, los manda la subcontratista, pero la responsabilidad sí es de ellos, porque son los que contratan. No hay nadie al que hacer el reclamo, pero esto ocurre en varias obras, quizás otras más pequeñas».
«A veces no es culpa del contratista, sino de la empresa que le fija un precio para que termine la obra y a veces, como no se puede, se empiezan a llenar vacíos y se vuelve todo precario. Ante la falta de trabajo actual, los trabajadores dependen de su único ingreso y ahí comienza el abuso de los empresarios», concluyó en tono crítico.