El viernes 8 y sábado 9 de septiembre se celebra en Rosario la 7° edición consecutiva de “La Noche de las Colectividades”. Más de 45 comunidades abren sus puertas para dar a conocer un pedacito de su identidad cultural a través de platos típicos, y espectáculos con sus respectivas danzas tradicionales. Esta movida nocturna fuera de lo común permite poder deleitarse con una amplia variedad en gastronomía de distintos territorios, y conocer más sobre las diversas culturas del mundo.

La iniciativa que se lleva adelante hace siete años tiene como objetivo promover el intercambio entre las diferentes expresiones culturales que también conforman la sociedad de la ciudad. El Director General de Relaciones Internacionales de la Municipalidad, Sergio Barrios, expresó a Conclusión: «Son 45 instituciones, algunas con una historia de más de 100 años en la ciudad. Para nosotros es muy importante que todo el quehacer de cada una de las colectividades se difunda, de modo que estos centros abran sus puertas y muestren las cosas que están haciendo».

En ese sentido manifestó que el objetivo de esta propuesta es poder difundir y compartir la cultura, por ello es que está planeado de forma que se pueda realizar la actividad sin tener que hacerlo a un alto costo.  “Todo se ofrece a la ciudad de Rosario de un modo abierto, gratuito, y en el caso de la comida a precios muy accesibles. No hay fin de lucro en estas instituciones más bien es mostrar todo lo que hacen, la difusión de la propia cultura y eso para nosotros vale mucho porque es parte de la identidad de Rosario”. Con respecto a la recepción de los rosarinos, Barrios manifestó que siempre es muy positiva,»La respuesta de la gente es bárbara y nos alienta a seguir trabajando».

Como todos los años, la Sociedad Libanesa de Rosario (Italia 1075) es uno de los centros que siempre recibe una amplia concurrencia. A salón lleno, desbordante de gente, Nestor Hage, presidente de la colectividad se mostró muy feliz de participar nuevamente en esta 7º edición,  «Año tras año crece, y nosotros año tras año nos organizamos mejor», indicó.

Entre los platos típicos más solicitados por el público, están el shawarma, las empanadas árabes, y el puré de garbanzos. Y en cuanto a los postres los baclagua, y los niditos, hechos a base de masa filo, frutos secos, y almíbar. 

Pablo Rachid, responsable gastronómico del centro puntualizó que las empanadas están elaboradas con la receta original, y que en el caso del shawarma en esta edición se le buscó dar una «impronta más rosarina», por eso consiste en un sándwich con menta libanesa. Otra de las propuestas es yogur casero, picada de puré de garbanzos con pasta de sésamo, y el keppe, que es un pastel de carne relleno de nueces.

Rachid señaló que la actividad culinaria libanesa, se diferencia de las demás por ser un «experimento de sabores y aromas». » Se caracteriza por el gusto más refinado, los sabores no están tan arriba, y los sabores son más perfumados, entonces la gente al paladar conoce muchísimas especias nuevas y no los abrumamos de golpe», manifestó el cocinero.

Por otro lado, con respecto a las propuestas artísticas, la sociedad libanesa cuenta con un despliegue de espectáculos que participan más de 200 personas, desde infantiles hasta adultos, en donde se puede ver la danza típica oriental también conocida como el bellydance, y el dabke que es la danza tradicional que se baila en forma mixta.

También se hizo presente la colectividad de Catalunya en el majestuso Centré Catalá (Entre Ríos 761), una de las más antiguas de la ciudad. Angel Perellia Puig, presidente de dicho centro, demostró mucho entusiasmo de recibir otra edición, de la que además expresó que fueron ellos los iniciadores de la idea.

La paella, la cazuela de calamares, el pan con tomate y jamón, las tapas y las rabas son algunas de las alternativas culinarias entre las que el público puede decidir deleitarse. «Somos del mediterráneo entonces sobre todo hay mucho pescado, y a la gente le gusta como lo hacemos nosotros», señaló.

Como no podía ser de otro modo, entre baile, música, y color, la colectividad de Brasil también participó este año de «La Noche de las Colectividades». Elsa Rosito, presidenta de la asociación, quien se define como «una argentina brasilera de corazón», expresó que es una gran satisfacción poder ver los resultados de muchos meses de trabajo. Por una cuestión de espacialidad y comodidad, lo celebraron junto a la Asociación Familia Piemontesa (Laprida 1350). 

Según explicó la presidenta, la bandera del territorio brasilero es la Feijoada, después le sigue Coxinha. «También tenemos picanhia que es un carne muy tierna que se hace a la espada», señaló. En bebida también hay una amplia variedad de tragos, entre las que se destaca la irremplazable caipirinha. «La idea es poder mostrar un poquito de lo que es nuestro Brasil acá», indicó.

«Me parece una idea extraordinaria que cada institución muestre su cultura, sus danzas, su gastronomía», señaló Oscar Satriano, perteneciente a la Asociación Piemontesa (Laprida 1350), quien expresó que el buen vino y la Bagna Cauda, son ejes fundamentales de la identidad que caracteriza a esta región de Italia.  

La propuesta también está acompañada de espectáculos tradicionales de la región de Piamonte con un vestuario semejante al que utilizaban en dichas sociedades italianas. «Así como cada región de Italia tiene su paso de baile, la nuestra es la currenta, era un modo de demostrar la felicidad», indicó Satriano.

«Se van a encontrar con buena gastronomía piedemontesa, y cultura, que es lo más importante, difundir cultura», concluyó.