La Secretaría de Obras Públicas de la Municipalidad de Rosario inició este martes las obras en San Martín entre 27 de Febrero y Ocampo. Las tareas forman parte de un plan de remodelación integral que se extenderá hasta avenida Pellegrini y demandará cortes de tránsito.

La obra incluye la construcción de nuevas cunetas que complementan el sistema de desagües pluviales de la zona, fresado y repavimentación de la calzada.

El inicio de las tareas tuvo lugar en San Martín entre 27 y Ocampo, con corte total y prohibición de estacionamiento. «El tránsito solo será interrumpido durante el tiempo de trabajo. Cuando la gente se retira, alrededor de las 16 o 17, eso vuelve a ser liberado», explicó este martes el secretario de Obras Públicas municipal, José Luis Conde, ante Conclusión.

Respecto a los plazos, el funcionario indicó que el programa busca terminar las tareas en 2 meses, con un ritmo de ejecución de dos cuadras por semana. Para esto, la obra tiene pactada una inversión total cercana a los 85 millones de pesos.

«Es hacer a nuevo una avenida de muchísimo tránsito, que estaba demandando este trabajo desde hace muchísimo tiempo. Estamos hablando de un total de nueve cuadras», detalló Conde.

Según aseguraron desde la Municipalidad, todas las maniobras de la obra y el soporte logístico para vecinos y comerciantes ha sido acordado en reuniones con representantes de los distintos grupos de la zona a través del Centro Municipal de Distrito Centro.

«La idea es terminar la obra a mediados de diciembre y trabajar en conjunto con los vecinos, porque obviamente es una obra muy invasiva, en una zona comercial que dificulta su trabajo. Como no hay otra manera de hacerlo, trabajaremos junto con ellos para que las interferencias sean las menores posibles», señaló Conde este martes.

Por otra parte, al ser consultado por la situación de aquellos barrios que aun no tienen cloacas ni calles que no sean de tierra, el secretario de Obras Públicas sostuvo que desde su área buscan evitar la dicotomía entre el centro y los barrios. «Intervenimos en lugares en los que consideramos que la densidad de circulación lo amerita. Lo hacemos tanto en calzada como en veredas; en zonas de escuelas y bancos, donde transita gente mayor. Igualmente también estamos trabajando en los barrios», afirmó.