Por Santiago Fraga
Este 2017 el Monumento Histórico Nacional a la Bandera cumplirá 60 años de existencia, tras su inauguración el 20 de junio de 1957. En este contexto, desde el 6 de marzo se están llevando las obras de refacción más significativas que el símbolo de la ciudad ha tenido en su existencia.
Conclusión dialogó en exclusiva con el director general del Monumento, Hernán Colautti, quien expresó su alegría, orgullo y satisfacción por estar llevando adelante una intervención de esta magnitud y dio detalles de la obra y lo que se podrá ver una vez finalizada.
En un principio, en estos momentos se está llevando adelante la primera de las dos etapas que tendrá la intervención, que durará 18 meses y tendrá un costo aproximado de 150 millones de pesos, de los cuales 70 % se hará cargo el Estado nacional y el otro 30 % la Municipalidad.
Quien lleva adelante este trabajo es Creaurban S.A., una empresa «con vasta experiencia en intervenciones en edificios de valor histórico y patrimonial como la Basílica de Luján y la Casa Rosada».
«Las obras son las anunciadas que comenzaron el 6 de marzo. Estamos en la primera etapa del proceso, que comenzó con la construcción de toda la estructura de andamios para la intervención en la fachada y que es de cateo y diagnóstico sobre la intervención que se tiene que hacer en cada uno de los espacios, tanto de la torre como de la cripta, en el espacio interno», detalló Hernán Colautti, que luego agregó: «Van a ver que esta obra avanza de manera importante de aquí en adelante, teniendo una duración estimada de 18 meses».
Sala de las provincias
El principal cambio que se verá una vez finalizados los trabajos se notará en lo que respecta a la incorporación de nueva tecnología que hace a la accesibilidad del espacio, «algo que era una vieja demanda y que ahora estaríamos saldando», según aseguró Colautti.
Pero lo más significativo se encuentra también en la creación de un nuevo espacio, que se llamará «la Sala de las Provincias».
«Será un espacio de interpretación con nuevas tecnologías y pensado para aquel que visite al Monumento que hoy no lo tiene. Estará ubicado en lo que habitualmente conocemos como donde está la Guardia de Gendarmería. Ese espacio será reutilizado y reconvertido en un espacio de interpretación», sostuvo el director general del Monumento.
Segunda etapa
Finalmente, una vez terminada esta primera parte del proceso de intervención se dará comienzo a la etapa final, que se enfocará principalmente en lo que respecta a la torre del monumento, siempre en caso de que sea necesario después del diagnóstico que se haga de esta primera etapa.
Alegría y orgullo
Según confió a Conclusión el director general del Monumento, las sensaciones que cruzan en este momento son de «alegría y satisfacción» por lograr «que el Monumento tenga esta intervención tan importante».
«Esta puesta en valor y refacción de algunos sectores era más que necesario, y en estos 60 años es la primera intervención de magnitud que se le hace a este Monumento. La posibilidad de estar al frente de un espacio tan icónico con una realidad tan auspiciosa como la que nos toca vivir hoy viendo llevar adelante esta obra nos llena de orgullo y de satisfacción», concluyó.
