La Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana realizó una intervención en el Distrito Sur que culminó con la clausura de un establecimiento donde funcionaba de manera clandestina una remisería. En el mismo lugar se verificó la existencia de un taller mecánico que trabajaba sin la habilitación correspondiente.
Personal de la Guardia Urbana Municipal se presentó en el domicilio de Lamadrid al 1800 a partir de denuncias de vecinos que detectaron la actividad irregular.
Contando con la orden de registro extendida por la Justicia, los agentes pudieron constatar la existencia de estos comercios no habilitados y secuestrar material probatorio como un teléfono fijo, dos handys y varios cuadernos donde se asentaban los traslados.
En lo que va del año, ya son 13 los locales clausurados a partir de esta actividad clandestina.
El titular de la Secretaría de Control, Gustavo Zignago, manifestó que «el material secuestrado será elevado a la Justicia Provincial de Faltas para que la misma intervenga en el caso aplicando las sanciones pertinentes».
Además recordó que «estas intervenciones se vieron reforzadas a partir las medidas propuestas por el Ejecutivo el 24 de agosto pasado, tendientes a generar entornos más seguros en toda la ciudad».
