El secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, declaró en conferencia de prensa este mediodía que dio por finalizado el operativo que Gendarmería Nacional llevó adelante desde su sorpresivo inicio el 10 de abril de 2014 en Rosario.

Berni afirmó que Rosario y la capital santafesina “quintuplican el promedio nacional del delito”. No obstante, indicó que “vinimos a una ciudad que había registrado cerca de 270 asesinatos y logramos lo más difícil que es torcer la curva, porque cerró el año con unos 30 crímenes menos”.

«Hubo más de 2.500 detenidos, controlamos más de 200 mil vehículos, se han secuestrado unos 12 mil vehículos que tenían pedido de secuestro y que estaban fuera de la ley para circular y hemos retirado de las calles más de 600 armas», contabilizó más adelante.

Además, confirmó que se quedarán más de mil gendarmes en “un destacamento reforzado de inteligencia criminal, que es el más grande del país, con integrantes de las cuatro fuerzas especialistas en lucha contra el narcotráfico, pero lo más importante de nuestro retiro es que quedan más de 350 causas abiertas en investigación del narcotráfico».

Asimismo evaluó: «El éxito de la misión está dado en que hoy vuelven a sus hogares los 2.000 efectivos que participaron del operativo» debido a que «no hemos tenido ninguna baja, las experiencias en el mundo hablan de que cuando se hacen este tipo de intervenciones siempre hay un enfrentamiento muy importante y una resistencia importante y eso no pasó, y esto no es producto de la casualidad sino de la planificación, de cómo fuimos sorteando cada uno de los obstáculos».

En el tiempo que duró el procedimiento reveló que vino “hasta dos veces por semana por la madrugada para monitorear el trabajo que se estaba realizando”.

Más allá de las cifras, Berni también dejó algunas observaciones de todo tipo:

  • “En Rosario el problema principal no es el narcotráfico sino la violencia del delito”.
  • “Donde se necesita compromiso policial y político, Bonfatti tomó cartas en el asunto a diferencia de Binner, quien al conocer las detenciones directas de policías en búnkers de Rosario, subestimó la situación hasta que terminó en todo esto”.
  • «No fue una decisión nuestra dónde ir a trabajar, sino fue un requerimiento del gobierno santafesino. Hemos intervenido en todos los barrios y en muchos le entregamos la posta a la policía».
  • “Los más de mil efectivos federales que están en la provincia sólo actuarán en delitos federales”.
  • “Nos pidieron una prórroga más, así que nos quedamos hasta que el gobierno de la provincia de Santa Fe pueda reclutar, preparar, entrenar y poner a disposición de la ciudadanía los 2.000 efectivos que han relevado a las fuerzas federales en los barrios».

La respuesta de Galassi

En una entrevista concedida a LT8, el ministro de Gobierno y Reforma de Estado, Rubén Galassi, se refirió al retiro de las tropas federales: “Seguiremos coordinando acciones en el combate al delito”. Y añadió que “desde ya que vamos a seguir planteando que la tarea de coordinación con las fuerzas federales es necesaria y en algunos casos imprescindibles”.

“Con ello, pretendemos brindarle las acciones de seguridad que la población está demandando. Lo que se va a tratar de hacer ahora es compensar esa ausencia con un despliegue mayor de patrullaje”, indicó más adelante el funcionario provincial.

Al momento de analizar el delito en la provincia, el ministro santafesino consideró: “Yo creo que Rosario tiene, como en tantos puntos del país, el crimen organizado». “Creo que tenemos presencia de sectores que procesan sustancias prohibidas que generan violencia colateral y que también hay mucha violencia interpersonal”.

Por otra parte, Galassi no diferenció como lo hizo Berni la gestión de los últimos dos gobiernos provinciales, al aclarar que en materia de seguridad “nosotros hemos trabajado tanto en el gobierno de Binner como en el de Bonfatti”.

“Creo que hacer un planteo partidario o buscar un matiz diferenciador por la fuerza política a la que se pertenece, es incorrecto”, dijo. Y agregó: “Creo que los únicos que festejan con estas declaraciones son los delincuentes”.

Seguidamente, consultado sobre el nombramiento del comisario inspector Juan Pablo Garro como jefe de la Unidad Regional Uno de la Policía provincial, investigado en 2006 por presuntas conductas antisemitas, el ministro Galassi dijo que “no es área de mi ministerio pero es un tema de sensibilidad pública” y que al tema “lo tomará el comisario Vergara que está de licencia”.