Vecinos del barrio La Cariñosa denunciaron que hace más de dos días que no tienen luz y destacaron que cuando quisieron manifestarse para reclamar esta situación fueron reprimidos por la policía de Santa Fe.
El corte energético comenzó el pasado martes y continúa hasta el día de hoy, afectando a cerca de 400 familias. Por otro lado, los vecinos volvieron a reclamar la necesidad de que se les habilite el suministro de agua potable.
El mismo martes, cuando los vecinos reclamaban el restablecimiento del servicio, la policía irrumpió en el lugar e hirió con balas de gomas a al menos dos personas y detuvo a otras dos por al menos cinco horas.
Conclusión se acercó hasta el lugar y dialogó con los vecinos, quienes explicaron que el corte inició el martes por la mañana, mientras una cuadrilla de la Empresa Provincial de la Energía (EPE) se encontraba realizando arreglos en la zona de Uriburu y Avellaneda.
Cuando los ciudadanos preguntaron por qué el servicio estaba interrumpido, el personal de la EPE les comunicó que a causa de modificaciones en la conexión no iban a tener más suministro energético. Sin embargo, y ante el reclamo de los vecinos, se vieron obligados a solucionar el asunto.
“La EPE nos hizo un puenteo de la columna nueva a la vieja para que tengamos luz, pero fue sólo para la gente que vive sobre Avellaneda, nosotros seguimos sin tensión”, explicó una vecina.
Al respecto, otra habitante del lugar llamada Nadia manifestó a Conclusión que durante la mañana de este jueves se hizo presente en el lugar una trabajadora de la EPE, quien informó que aún continuaban los trabajos en el lugar y que la caja que abastece la zona ya tenía tensión, pero que cada habitante debía conectarse a la misma “por su cuenta”.
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Además, la vecina señaló que para efectuar esta maniobra se necesita una escalera, ya que la caja se encuentra a una altura considerable, y también se requiere de alguien que tenga conocimientos eléctricos.
En este sentido, explicaron que hay personas del barrio que necesitan del servicio ya que tienen botones antipánicos (que funcionan con electricidad), son insulinodependientes o tienen bebés recién nacidos.
Para los vecinos, el corte de luz y la falta del servicio de agua potable se debe a los problemas de escrituras que tienen los terrenos de este barrio.
Asimismo, los habitantes de La Cariñosa denunciaron que el pasado martes, ante sus reclamos, los trabajadores de la EPE llamaron a la Policía y le comunicaron que el problema “estaba solucionado”.
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Como seguían sin luz, los vecinos decidieron manifestarse para reclamar el restablecimiento del servicio, pero fueron reprimidos por la fuerza provincial.
“Un policía le tiró balazos en la pierna a un muchacho con muletas. Otra policía quería esposar a la mujer que lo acompañaba y también quería esposar a una vecina con epilepsia en pleno ataque”, denunciaron los habitantes de La Cariñosa.
Según el relato de los vecinos, el joven con muletas que fue herido con balas de goma fue trasladado, junto a su mujer, a la Comisaría 21 -a pesar de que la Policía informó que lo llevaban a un hospital- y allí les “inventaron una causa por subirse al móvil policial”.
En tanto, otra vecina denunció amenazas por parte de agentes policiales, quienes les advirtieron que había cinco ciudadanos identificados a quienes podrían inventarles causas judiciales y golpearlos y detenerlos en caso de cruzarlos por la vía pública.
