Muchas banderas, cotillón y televisores; pero poca gente. La postal se repitió en la gran mayoría de los bares de Rosario esta noche de domingo, cuyas expectativas se vieron opacadas, quizás en buena parte, por la llovizna que desde el sábado ataca a la ciudad.bares2

Si bien pocos lugares esperaban un lleno total de sus establecimientos, pocos también se imaginaban la baja concurrencia. Una ligera recorrida por la ciudad minutos antes del encuentro reflejó que pocos lugares superaban el 70% de ocupación, mientras que la cara más común era la de ver tan sólo de dos a cinco mesas con gente.

Sin embargo, aquellos que sí se hicieron presentes para alentar a la Selección demostraron tener toda la fe y las expectativas puestas en un triunfo argentino.

Por ejemplo Augusto, entrerriano, vaticinó en
la previa un resultado de 3 a 2 para el combinado del Tata Martino, con goles de Di María, Messi y Banega, priorizando el ver un buen partido de fútbol por sobre una victoria con comodidad.

Roberto, su amigo, porteño e hijo de japoneses, cantó un 2 a 0 en favor de la Selección, con respectivos tantos del ‘Fideo’ y del 10. El mismo resultado fue carta repetida como premonición en distintas mesas, donde sólo variaba el autor de los tantos, pero siempre con fe en los jugadores rosarinos.

bares3Uno de los lugares más llenos fue el típico Paso Sport, de Pellegrini y Paraguay. Allí, los dos pisos del establecimiento estuvieron desde temprano llenos de hinchas que fueron a apoyar a la Selección. Mirtha, la encargada del lugar, habló con Conclusión y aseguró que la asistencia superó sus expectativas, teniendo que habilitar el nivel superior que «no es normal utilizarlo, salvo en clásicos». A su vez, aseguró que la ocupación fue similar a la de la final anterior, y que la gente desde el arranque se encontraba muy ansiosa.