Unos ochentainueve vehículos fueron remitidos al corralón luego de los 496 controles preventivos sobre el tránsito que se registraron entre la noche del jueves y este domingo. Fueron sancionados por alcoholemia positiva 31 personas, y una más por narcolemia.

La Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana municipal llevó adelante múltiples intervenciones nocturnas junto a efectivos de la Policía Comunitaria, en control de las condiciones de seguridad vehicular y de conducción, a través de la práctica de tests para detectar alcohol o droga en sangre.

El secretario de Control y Convivencia Ciudadana municipal, Gustavo Zignago, dio cuenta de que entre el jueves a la noche y este domingo a la mañana, se concretaron 496 fiscalizaciones vehiculares en los puntos urbanos de mayor circulación. En total, se remitieron 89 autos y motos al corralón municipal.

Se trata de unidades cuyos conductores incumpliendo con normativas de tránsito: 31 fueron casos de alcoholemia positiva y una por narcolemia. El resto de traslados están relacionados a cuestiones de seguridad vial y documentación.

Zignago precisó que de los test de alcoholemia que dieron resultados positivos, el nivel de alcohol en sangre más alto registrado fue de 2,10 gramos. Respecto a los análisis de consumo de estupefacientes, hay que señalar que el único positivo se trata del conductor de un camión que recibió el control en Ombú y Callao. El procedimiento se realizó esta mañana y  las sustancias detectadas fueron cocaína y cannabis.

«Trabajamos por la construcción de un tránsito seguro para peatones y conductores, basado en un uso responsable del espacio público a partir de nuestra presencia preventiva como Estado municipal», destacó el funcionario quien remarcó la importancia del cumplimiento de las normas en este proceso.