La mensajería WhatsApp anunció este miércoles que a partir de hoy limitará la función de reenvío de mensajes, llevándola a un límite máximo de cinco personas.

Esta medida había sido tomada meses antes, en julio de 2018, en la India, con el objetivo de frenar la difusión de noticias falsas, que suelen provocar tumultos y homicidios en este país asiático.

Precisamente, en aquel entonces, la empresa tomo la medida luego de que los rumores en las redes sociales sobre la presunta presencia de secuestradores de niños causaran la muerte de una veintena de personas, linchadas por muchedumbres.

Estos sucesos tuvieron tal impacto mediático que el gobierno indio llegó a amenazar con procesar judicialmente a esta aplicación propiedad de Facebook, ya que consideraba que la difusión de noticias falsas también era «su responsabilidad».

Ante la presión gubernamental, WhatsApp anunció allí la supresión posibilidad de enviar un mensaje a varias conversaciones a la vez y se comprometió a intentar limitar que un mismo mensaje sólo pueda enviarse cinco veces, que es lo que llevaron adelante ahora.

La limitación se producirá cuando los usuarios instalen la actualización de la aplicación.

La India, primer mercado mundial de Whatsapp

Con más de 200 millones de usuarios, India es el primer mercado mundial de WhatsApp. Los indios reciben a diario un número espectacular de mensajes e imágenes, que suelen reenviar a otros contactos.

Tras la llegada de los smartphone y de internet en los móviles en todos los territorios indios, esta expansión tecnológica favoreció que los falsos rumores se multipliquen por las redes con gran celeridad. Todavía poco habituada a las nuevas tecnologías, una parte de la población india considera veraces la mayoría de las informaciones que circulan por WhatsApp.

«Creemos que estos cambios -que seguiremos analizando- servirán para preservar el objetivo inicial de WhatsApp, una aplicación de mensajería privada», declaró el grupo tecnológico estadounidense.

La semana anterior a aquel anuncio de Whatsapp se produjo el último homicidio motivado por una falsa información que circuló por el servicio de mensajería, cuando una muchedumbre de 2.000 personas dio una paliza mortal a un informático de 27 años en el estado de Karnataka, en el sur del país, creyendo que se trataba de uno de los supuestos secuestradores de niños denunciados en Internet.