Japón crea la primera escuela de eSports para profesionales
La escuela, además de tener todas las materias tradicionales, tendrá especialización en jugador profesional, streamer, programador, analista de juegos, escritor y más.
Por Mariano Peyronel
Los eSports vienen en crecimiento a nivel mundial. Cada vez hay más jugadores y equipos que se dedican profesionalmente a jugar videojuegos y competir en torneos, donde los premian con sumas muy importantes de dinero.
Japón, uno de los países impulsores de videojuegos, donde anidan nada más y nada menos que Nintendo y Sony (PlayStation), no quiere quedarse atrás.
En 2022, la eSports Koutou Gakuin (o Escuela Secundaria de eSports) comenzará sus actividades en Shibuya, Tokio. Será la primer escuela del país que busca formar jugadores profesionales de forma oficial y estará patrocinada por la compañía de telecomunicaciones NTT y el equipo de fútbol japonés Tokio Verdy.
No solo enseñará las materias tradicionales de toda escuela, sino que se especializará en ayudar a los estudiantes a que se conviertan en profesionales de los eSports.
La escuela Koutou Gakuin tendrá diferentes disciplinas o especializaciones: jugador profesional, streamer, programador, analista de juegos, escritor y muchas más.
El equipamiento de las aulas de la escuela e-Sports Koutou Gakuin demuestra que se tomarán su trabajo muy seriamente. Gracias al apoyo de sus patrocinadores, las aulas estarán muy bien equipadas con 40 computadoras de alta gama.
Para los entendidos de hardware de PC, las computadoras tendrán en su interior: Nvidia GeForce RTX 3070, un Intel Core i7-11700, 32GB de RAM DDR4 y un SSD NVMe de 1TB.
La eSports Koutou Gakuin ofrecerá los tres años de educación secundaria básica y clases personalizadas para que los estudiantes puedan formarse con profesionales de los eSports. Además, la escuela también brindará educación sobre el cuidado de la salud en general.
La escuela tendrá una formación completa en diversos tipos de juegos como RTS, FPS, MOBA, TPS y más.
Sin lugar a dudas, Japón es pionero en lo que se va a dar a nivel mundial en un futuro no muy lejano.