A distancia de los enunciados «apocalípticos» o «integrados» sobre el futuro de la radio y a poco del centenario de la primera emisión radial en Argentina (la ópera «Parsifal», de Richard Wagner, el 27 de agosto de 1920), Espada exhortó a la prudencia sobre cualquier sentencia cuando «cada día, 5.5 millones personas escuchan radio en el área metropolitana del Buenos Aires».

«Hoy RadioCut es una de las principales plataformas de escucha radiofónica del país y es algo disruptivo», afirmó en una entrevista con Télam.

«Eso revela -apuntó- que cuando ofrecés la posibilidad de acceder al contenido -las webs de la mayoría de las radios no sólo no ofrecen contenidos ‘nuevos’ sino que tampoco los que acaban de dar al aire-, las audiencias responden», puntualizó el especialista, para quien «tal vez las audiencias están necesitando que les den el contenido de otra manera»

«Pero la radio argentina da poco en relación a contenidos desprogramados, que es hacia donde va el formato», agregó.

– Télam: ¿Es legítimo hablar de un estatus de crisis para la radio?

– Agustín Espada: Es legítimo en el plano local. En todo el mundo están bajando los niveles de audiencia, pero en Argentina, además, hay una crisis que tiene que ver con la estructura del mercado que en si misma no se sostiene: hay radios que no se preocupan por la cadena de valor, por tener mejores contenidos, por atraer anunciantes. Donde hay una tenencia de radios por razones ajenas a la radio. Eso produce precarización artística y que haya poco interés por pensar el problema del consumo y las plataformas.

Las audiencias caen un poco siempre que aparece otra tecnología. Pero luego hay una precarización que excede lo tecnológico. Cada año se abre el «mercado de pases de la radio» y son siempre los mismos nombres, hay poca oferta sub 30, pocas noticias sobre estrategias digitales.

– T :¿No hay una modelo de comercialización de los nuevos formatos?

– A.E.: En España la plataforma de contenidos radiofónicos más con más oyentes es Podium Poscast, del Grupo Prisa, un grupo tradicional de medios. En la Argentina hay problemas analógicos que detienen estos proyectos. Una vez el gerente multiplataforma de una de las tres radios AM más escuchadas del Buenos Aires me dijo simplemente que decidieron no tener estrategia digital porque la plataforma tradicional estaba funcionando bien. Clarín, para marcar un contraste, es una empresa que preocupada en pensar el futuro de sus audiencias radiofónicas. Más allá de discutir si pueden hacer más o poner el foco en lo que no hacen, hay allí alguien que está pensando en quién los va a escuchar dentro de 20 años cuando envejezca las audiencia.

– T: Los dispositivos de escucha predominantes siguen siendo los tradicionales, ¿Cómo influye ese factor?

-A.E: Los dispositivos más relevantes de escucha siguen siendo los tradicionales (el aparato de radio, el auto, en ese orden) pero sí hay un crecimiento, en el plano internacional, de las plataformas digitales. No en la Argentina. Los jóvenes no van esas plataformas a escuchar radio. Habría que ver si es porque no les interesa en formato o porque los contenidos que hoy hay en ese formato son los que no funcionan. Hay ejemplos en Estados Unidos, España o en la BBC que muestran que las audiencias jóvenes, incluso infantiles, dan buenas respuestas cuando hay buenos contenidos segmentados. Eso acá no se está haciendo.