Las mayores plataformas de Internet y una decena de países firmaron hoy en París una iniciativa no vinculante que busca erradicar de la web los contenidos extremistas y violentos, dos meses después de masacres en dos mezquitas de Nueva Zelanda.

Ejecutivos de Facebook, Google, YouTube, Twitter, Wikipedia, Dailymotion, Qwant y Microsoft se reunieron con los líderes de Francia, Emmanuel Macron; Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, y otros países para rubricar el denominado «Llamado de Christchurch».

La iniciativa toma su nombre de la masacre de la ciudad neozelandesa de Christchurch, donde hace exactamente dos meses un supremacista blanco asesinó a tiros a 51 personas en dos mezquitas y transmitió el tiroteo en vivo a través de Facebook Live.

Para evitar que eso se repita y para combatir toda difusión de contenidos similares a través de Internet, Ardern, pidió apoyo a Macron.

Este convocó una cumbre y logró que nueve jefes de Estado y Gobierno, la Comisión Europea y ocho gigantes de internet plasmaran su firma en un documento para «plantar cara a la difusión en línea de contenidos terroristas y extremistas violentos».

El pacto, al no ser vinculante, es principalmente simbólico y tiene como objetivo mantener la presión sobre las plataformas y redes sociales.

Las empresas que firman el acuerdo se comprometen a mejorar sus procesos de moderación de contenidos y a compartir más información sobre el trabajo realizan para evitar que el material extremista se vuelva viral.

Por su parte, los gobiernos acuerdan trabajar en leyes que prohíban el contenido tóxico de las redes sociales.

«El llamado es una hoja de ruta para la acción», dijo la jefa de gobierno neozelandesa en conferencia de prensa con Macron.

«Nos compromete a todos a construir una Internet más humana que no pueda ser mal utilizada por terroristas para sus propósitos odiosos», agregó, citada por la cadena CNN.

Se espera que mañana firmen la «El llamado de Christchurch» un grupo de países, entre ellos los miembros del G7.

«La difusión de ese tipo de contenido online tiene un impacto adverso en los derechos humanos de las víctimas, en nuestra seguridad colectiva y en personas de todo el mundo», afirmaron los firmantes del pacto en un comunicado conjunto.

Facebook, eje de las críticas tras la masacre, anunció hoy medidas para restringir el acceso su función de transmisión en vivo.

Además de Francia, Nueva Zelanda y el Ejecutivo comunitario, el llamado cuenta con la firma de Canadá, Irlanda, Jordania, Noruega, el Reino Unido, Senegal e Indonesia, cuyos jefes de Estado o de Gobierno estuvieron en la capital francesa.

España, Australia, Alemania, la India, Japón, Holanda y Suecia, ausentes en París, mostraron su respaldo.

Los participantes en el encuentro minimizaron la ausencia de Estados Unidos entre los firmantes, pese a que ese país alberga a la mayor parte de las empresas del sector.

Macron destacó que la Casa Blanca está «de acuerdo con el objetivo» del «Llamado de Christchurch» de combatir en la red la difusión de contenidos «terroristas» y que incitan al odio, aunque reconoció divergencias sobre la forma de lograrlo.