La regulación del uso medicinal del cannabis se expande en los países del sur de América, al impulso de pacientes y familiares que participan hoy y mañana de un seminario internacional en Chile, mientras Uruguay realiza una ExpoCannabis este fin de semana, Paraguay se apresta a debatir el tema en el Parlamento y en Argentina ya tiene media sanción legislativa el empleo de la planta como fármaco.

Chile es uno de los pioneros en la región en el autocultivo de cannabis con fines medicinales, protegido gracias a un decreto del 2015 de la presidenta Michelle Bachelet, que lo incluyó en la lista de remedios autorizados por el Ministerio de Salud, si bien aún se debate una reforma legal que termine de darle el marco adecuado a este tipo de consumo.

El camino recorrido por quienes conforman las fundaciones Daya y Mama Cultiva en ese país es mirado con atención por las naciones vecinas, por eso la capital chilena es sede, entre hoy y mañana, del Segundo Seminario Internacional de Cannabis Medicinal, del cual participan representantes del Ministerio de Salud, de los colegios de Médicos, de Químicos, Farmacéuticos, Bioquímicos, además de las universidades de Valparaíso y de La Frontera.

Una de las expositoras será Valeria Salech, presidenta de Mama Cultiva Argentina y también está en Chile la presidenta de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, Carolina Gaillard, que impulsó el proyecto que obtuvo media sanción en el recinto argentino.

La iniciativa autoriza los usos medicinales, las investigaciones científicas y la importación de un producto a base de cannabis que sirve para tratar algunos casos de epilepsia refractaria, e incorpora un registro de usuarios medicinales y familiares que cultivan, norma que ahora deberá debatirse en el Senado argentino.

Ana María Gazmuri, directora de Fundación Daya, adelantó en el portal de la ONG. «dentro de estos meses iniciaremos el primer estudio clínico con un producto nacional en base a cannabis y necesitamos generar estas instancias que permitan a los profesionales y estudiantes de las áreas de la salud, tanto de Chile como del extranjero».

Para conocer la experiencia y aportar novedades llegaron hasta el país trasandino profesionales de Estados Unidos, España, México, Perú, Bolivia, Brasil, Colombia y Ecuador.

El otro país adelantado en legalizar el uso del cannabis para diversos fines es Uruguay, que desde 2013 tiene una ley específica y que entre mañana y el lunes realiza una exposición con numerosas actividades, entre las cuales un

consultorio de orientación de uso medicinal.

En tanto, Paraguay, principal productor de marihuana de Suramérica y donde la compraventa y producción de esta planta es ilegal, se plantea, a través de varios proyectos legislativos, despenalizar el uso terapéutico del cannabis, tal como lo están haciendo sus vecinos.

En ese país la marihuana terapéutica solo se administra bajo autorización del Ministerio de Salud para «uso compasivo» en casos puntuales como niños con epilepsia refractaria, que no responden a los tratamientos con fármacos convencionales, declaró a la agencia Efe Víctor Gaona, especialista en neurología pediátrica.