Cinco personas murieron y otras 10 resultaron heridas por una explosión suicida registrada este viernes dentro de una mezquita en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa del noroeste de Pakistán, según informaron los equipos de rescate que trabajan en el lugar.

El incidente se produjo en el distrito de Hangu de la mencionada provincia, donde un atacante se inmoló en el salón principal de la mezquita, situada en una estación de policía, según declaró a la agencia de noticias Xinhua el portavoz de la entidad estatal Rescate 1122, Bilal Faizi.

«Dos terroristas arrojaron granadas de mano contra los policías en la entrada principal de la comisaría, siendo uno de ellos abatido en el vestíbulo tras un tiroteo con policías, mientras que el otro se coló con éxito dentro de la mezquita», detalló Faizi.

Y añadió que el tejado de la mezquita colapsó parcialmente, cuando el atacante suicida detonó su chaleco explosivo a la entrada.

“Había entre 30 y 40 personas en el interior de la mezquita en momentos del atentado, quedando varias de ellas atrapadas bajo los escombros”, explicó.

Más adelante, el vocero especificó que “la operación de rescate ha sido completada y todas las personas atrapadas fueron recuperadas y trasladadas al hospital militar del distrito” y agregó que “se teme que la cifra de muertos aumente porque varios de los heridos están en condición crítica”.

Ningún grupo ha reivindicado aún su responsabilidad por el ataque.

Esta fue la segunda explosión en golpear este viernes al país del sur de Asia. Horas antes, 50 personas murieron y más de medio centenar resultaron heridas por una explosión en la provincia suroccidental de Baluchistán.