El arzobispo de San Francisco, Salvatore Cordileone, prohibió a la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, la demócrata Nancy Pelosi, recibir la comunión por apoyar el derecho al aborto, según una carta de la autoridad eclesial conocida hoy.

«Como no has rechazado públicamente tu posición sobre el aborto, y sigues refiriéndote a tu fe católica para justificar tu posición y recibiendo la Santa Comunión, la hora ha llegado», manifestó el arzobispo en su carta, que reproduce la agencia AFP.

«Estoy por lo tanto notificando que tú no puedes presentarte a la Santa Comunión y que, de hacerlo, no serás admitida para recibirla hasta que repudies públicamente a tu defensa de la legitimidad del aborto y confieses y recibas absolución de este grave pecado en el sacramento de la Penitencia», agregó el prelado.

Salvatore Cordileone

Pelosi, una católica practicante de California, dijo que trabajaría con el fin de pasar una ley que confirme el derecho de las mujeres al aborto tras la filtración de un borrador de una decisión de la Corte Suprema que pretendería anular la sentencia Roe v. Wade de 1973, que garantiza el acceso a este procedimiento en todo el país.

La oficina de Pelosi no respondió inmediatamente a una consulta que hizo la agencia AFP sobre la carta del arzobispo.

La Comunión – el rito en que los feligreses consumen pan y vino consagrados por un sacerdote – es un acto central del dogma en la Iglesia católica.

La filtración del borrador de la Corte Suprema, donde el expresidente Donald Trump logró instalar una mayoría conservadora, expuso una fuerte división en la dirigencia y en la población de Estados Unidos.

Si la Corte Suprema finalmente da marcha atrás con el derecho establecido a nivel federal desde la decisión «Roe v. Wade», de 1973 -decisión que debe anunciar antes del 30 de junio-, quedará en manos de los 50 estados de la Unión decidir si penalizan o no el aborto.

Se estima que 26 estados gobernados por conservadores prohibirán la interrupción voluntaria del embarazo.

La comunión es un acto central del dogma en la Iglesia católica

Ayer, por caso, el parlamento de Oklahoma votó hoy una iniciativa que prohíbe el aborto desde la fecundación, lo que convirtió al estado, un bastión conservador del sur de Estados Unidos, en el territorio con las regulaciones más restrictivas para la interrupción voluntaria del embarazo.

La votación se produjo en momentos en que el derecho al aborto en Estados Unidos se ve amenazado, tras la filtración de un documento de la Corte Suprema en el que se muestra dispuesta a revocar la decisión de hace 50 años que garantiza ese derecho.

Kamala Harris

Inspirada en una ley aprobada por Texas en septiembre, la nueva norma de Oklahoma abre la puerta a que los ciudadanos presenten demandas contra personas sospechosas de haberse practicado un aborto.

La definición de aborto, según el texto, no incluye, sin embargo, “el uso, prescripción, suministro o venta de píldoras del día después, o cualquier tipo de anticoncepción o anticoncepción de emergencia”.

Por su parte, la vicepresidenta de los Estados Unidos, Kamala Harris, calificó a la votación de Oklahoma como “la última de una serie de ataques flagrantes de legisladores contra las mujeres”.

También instó a los estadounidenses a elegir líderes que defiendan el derecho al aborto “a nivel local, estatal y federal”. Estados Unidos celebra en noviembre elecciones de medio mandato.