Luego de que el Ministerio de Defensa de Rusia dijera que el fondo de inversión Rosemont Seneca, administrado por Hunter Biden -hijo del presidente de Estados Unidos, Joseph Biden- financió un programa biológico del Pentágono en Ucrania, el ex mandatario norteamericano, Donald Trump, pidió que el Kremlin dé precisiones sobre esta acusación y recibió una respuesta por parte del Kremlin.

Previo a la respuesta de Rusia, Trump acusó a Hunter Biden de haber recibido, en 2014, 3,5 millones de dólares por parte de Elena Baturina, quien en ese entonces era esposa del ya fallecido alcalde de Moscú, Yuri Luzhkov. Según la denuncia, este pago se efectuó por un trabajo de consultoría de la firma Rosemont Seneca.

En las últimas horas, Trump -representante del Partido Republicano y opositor al actual gobierno estadounidense- pidió que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, revele cualquier “información comprometedora” sobre Hunter Biden.

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Al ser entrevistado el pasado martes por el periodista John Solomon en el programa “Just the News”, Trump reclamó que la esposa del alcalde de Moscú le entregó 3,5 millones de dólares a Hunter Biden, y exclamó: “Eso es mucho dinero. Putin podría saber la respuesta de eso y creo que debería revelarla”.

Tras este pedido, desde Moscú difundieron información que podría dar un giro al caso, ya que vincula al hijo del presidente estadounidense con el financiamiento de un programa biológico militar y con la venta de agentes patógenos a Ucrania.

El Ministerio de Defensa de Moscú divulgó este jueves una correspondencia entre Hunter Biden, funcionarios de la Defense Threat Reduction Agency (DTRA) y empresas vinculadas al Pentágono que confirmarían que cumplió un rol crucial en la financiación de trabajos con agentes patógenos en Ucrania.

Al respecto, el jefe de las Fuerzas de Defensa Radiológica, Química y Biológica de las Fuerzas Armadas de Rusia, Igor Kirillov, aseguró: “El contenido de los mensajes muestra que Hunter Biden fue decisivo al brindar oportunidades de financiamiento para el trabajo con los patógenos en Ucrania, al asegurar fondos para la Black & Veach y Metabiota, una empresa de biotecnología estadounidense”.

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En tanto, el Ministerio de Defensa ruso publicó un listado de quienes estarían involucrados en la creación de componentes de armas biológicas en Ucrania. Una de las figuras claves de la lista es Robert Pope, funcionario de la DTRA, que depende del Pentágono.

En tanto, la vocera de la Casa Blanca, Kate Bedingfield, fue consultada sobre los comentarios de Trump y expresó: “¿Qué clase de estadounidense, y mucho menos un expresidente, piensa que este es el momento adecuado para entrar en un plan y presumir de sus conexiones con Vladimir Putin? Sólo hay uno y es Donald Trump”.

¿En qué habría consistido el programa biológico?

Desde el Gobierno de Rusia, señalaron que los documentos hallados permitieron rastrear patrones de interacción entre las agencias gubernamentales de Estados Unidos y las instalaciones biológicas de Ucrania.

Según Kirillov, el Ministerio de Defensa ruso tiene documentación oficial que prueba que 30 laboratorios ucranianos estuvieron involucrados en actividades biológicas militares; y se exportaron 16.000 muestras biológicas a Estados Unidos y sus aliados desde este país de Europa del este.

Al respecto, indicó que se tomaron 4.000 muestras de sangre de militares en Lviv, Kharkov, Odessa y Kiev para estudiar la prevalencia de anticuerpos contra el hantavirus.

“Este examen a gran escala de la inmunidad natural de las poblaciones probablemente se llevó a cabo para seleccionar los agentes biológicos más peligrosos para las poblaciones en ciertas regiones”, explicó el funcionario ruso.

Además, agregó que se exportaron patógenos peligrosos y sus transportadores desde Ucrania.

Se sospecha que el fondo Rosemont Seneca tiene recursos por un valor de al menos 2.400 millones de dólares; y que la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, la Fundación George Soros y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades también podrían haber participado en la financiación y el desarrollo de estos programas.