Los trabajadores de transportes en Alemania fueron convocados a una huelga el próximo lunes para presionar en unas negociaciones salariales que se presentan altamente complejas por la fuerte inflación que afecta al país.

Desde el gobierno alemán señalan que en gran parte, la crisis es producto de los cimbronazos de la guerra en Ucrania. Los empleados de aeropuertos, ferrocarriles, transporte marítimo, concesionarios de autopistas y transportes locales, fueron convocados a «una jornada completa de paro», anunciaron los sindicatos Ver.di y EVG en conferencia de prensa en la capital, Berlín.

La huelga afecta desde este miércoles al puerto de Hamburgo, el primero de Alemania, que redujo el acceso a los barcos de más de 90 metros.

Este movimiento unitario entre ambos sindicatos es excepcional en la primera economía de la zona euro, donde las negociaciones salariales se hacen ramo por ramo.

«Esperamos una amplia participación en las huelgas», expresó el dirigente de Ver.di, Frank Werneke.

La medida de fuerza refleja el clima social cada vez más tenso a causa de una fuerte inflación que alcanzó 8,7% en febrero, algo casi inédito en un país históricamente estable en su economía.

Los dos sindicatos piden aumentos de salario de entre 10,5% y 12% para compensar la inflación. Los sindicatos se quejan también por las condiciones de trabajo deterioradas, en un contexto de carencia estructural de mano de obra en el país.

Los aeropuertos de Bremen, Berlín, Hamburgo y Hanover ya anularon 351 vuelos el 11 de marzo pasado por un paro laboral de 24 horas del personal de los controles de seguridad.