El presidente del gobierno español en funciones, Mariano Rajoy, aseguró hoy que no pondrá condiciones al Partido Socialista (PSOE) para negociar un acuerdo de investidura e insistió en que unas terceras elecciones generales sería un «disparate».

«No voy a poner ninguna condición», dijo Rajoy en declaraciones la prensa al llegar a un Congreso en Málaga, después de que trascendiera que su Partido Popular (PP) estaba exigiendo a los socialistas un acuerdo de «mínimos» que incluyera un compromiso respecto a los próximos presupuestos del Estado.

Rajoy insistió en que su prioridad sigue siendo formar un gobierno de coalición o llegar a un pacto con el PSOE que incluya grandes asuntos de gobierno -como la unidad territorial, techo de gasto, estado de bienestar, etcétera- y si no lograr que los socialistas «nos dejen gobernar».

La renuncia de Pedro Sánchez como secretario general del PSOE el pasado sábado allanó el camino a un acuerdo para que los socialistas pasen del «no» a la abstención. Sánchez se vio obligado a dimitir después de que el Comité Federal de su partido volteó su plan de formar un gobierno alternativo al PP.

En ese sentido, indicó que hablará con el socialista Javier Fernández, quien preside la gestora que asumió el control del PSOE tras la dimisión de Sánchez para intentar abrir una negociación.

«Quiero tener un diálogo a la mayor celeridad «, remarcó Rajoy, para luego recordar que «todavía queda tiempo, pero no demasiado», y que «unas terceras elecciones es un disparate».

Los socialistas españoles se encuentran en medio de un difícil proceso de transición que debe gestionar el paso del «no» a la abstención luego de varios meses de oposición frontal a Rajoy por parte de Sánchez.

La gestora al mando de la segunda fuerza política de España debe fijar aún una fecha para un Comité Federal que decida la posición que adoptará el partido ante unas eventuales negociaciones con el PP.