Foto: Neill Hall/EFE

Manifestantes y la Policía Metropolitana de Londres protagonizaron este sábado incidentes en la capital británica en el marco de una marcha contra el racismo, en repudio al asesinato en Estados Unidos de un hombre afroamericano por parte de un uniformado.

Los choques, en los que se registraron gases lacrimógenos y pedradas, se produjeron especialmente en el área de Whitehall, la zona gubernamental y cerca del Parlamento, cuando los efectivos de la fuerza de Seguridad avanzaron sobre la movilización para obligar a los manifestantes a retroceder.

El objetivo de la Policía Metropolitana londinense era evitar actos de vandalismo, como se habían registrado la semana pasada cuando varias estatuas había sido pintadas con aerosol.

El primer ministro británico, Boris Johnson, había lamentado esos hechos, a los que había definido como «absurdos y vergonzosos».

La manifestación de este sábado se dio en el marco de las protestas que lleva adelante el movimiento «Black Lives Matter» en distintas ciudades de todo el mundo para repudiar el asesinato del afroamericano George Floyd en la ciudad estadounidense de Minneápolis a manos de un efectivo de la Policía local.

También en Paris

Varios miles de personas se manifestaron este sábado en París para condenar la arraigada discriminación y la brutalidad policial contra las minorías de Francia, en una continuación de las marchas a nivel mundial desatadas por la muerte del afroamericano George Floyd en Estados Unidos.

Gritos indignados surgieron desde la pacífica y diversa multitud cuando un pequeño grupo de personas blancas de extrema derecha se subió a un edificio que daba a la protesta y desplegó una enorme pancarta que decía «racismo anti-blanco».

La policía no detuvo a los contramanifestantes, pero residentes del edificio rasgaron parte de la pancarta, y uno de ellos levantó su puño en señal de victoria, reportó el diario local Le Parisien.

Los agentes antidisturbios impidieron que los manifestantes de la protesta mayor se acercaran a los activistas de extrema derecha, que se terminaron retirando del lugar.

La policía escoltó la marcha a lo largo de su recorrido en un intento de disuadir actos de violencia o enfrentamientos esporádicos como los que se registraron en otras recientes protestas en Francia en apoyo al movimiento Black Lives Matter (Las Vidas Negras Importan).

El movimiento surgió en Estados Unidos en los últimos años luego de una serie de muertes de afroamericanos a manos de policías y se internacionalizó luego del crimen de Floyd por un policía blanco en la ciudad de Minneapolis el 25 de mayo pasado.

Desde la muerte de Floyd, el Gobierno francés está bajo presión para lidiar con denuncias que vienen desde hace años de un excesivo uso de la fuerza de parte de la policía, en particular contra miembros de minorías de este país con un muy polémico pasado imperialista.

El Ministerio del Interior prometió esta semana erradicar el racismo de la policía y anunció una prohibición de los maniobras de estrangulamiento durante las detenciones.

Pero los sindicatos de policía hicieron su propia manifestación ayer para denunciar que se los etiqueta injustamente de racistas y que no tienen las suficientes herramientas para lidiar con sospechosos violentos.