Una bomba detonada en una mezquita de Kabul acabó hoy con la vida de Samiullah Raihan, un importante clérigo favorable al gobierno, y otras dos personas en un incidente que también dejó al menos 18 heridos.
La explosión, de la que el gobierno responsabilizó a los talibanes, ocurrió cerca del mediodía local en el este de la capital afgana durante los rezos colectivos del viernes, afirmó el portavoz del Ministerio del Interior, Nasrat Rahimi.
«En la explosión, por desgracia, un destacado clérigo del país, Maulavi Raihan -que dirigía las plegarias- murió», precisó Rahimi.
El vocero del Ministerio de Salud Pública, Wahidullah Mayar, por su parte, elevó en un mensaje en la red social Twitter a tres el número de víctimas mortales y a 18 los heridos en la explosión.
El estallido se produjo por una carga explosiva colocada en la mezquita cerca del lugar desde donde el clérigo dirigió las oraciones, dijo el portavoz de la Policía capitalina, Firdaws Faramarz, citado por la agencia de noticias EFE.
«Los heridos ya han sido enviados a hospitales cercanos y la Policía ha comenzado la investigación, más tarde se darán a conocer nuevos detalles», dijo Faramarz.
Por el momento, ninguna formación se atribuyó el atentado, aunque en el pasado tanto los talibanes como el Estado Islámico han atacado a autoridades religiosas afines al gobierno.
Raihan era un destacado clérigo que apoyaba al Ejecutivo y abogaba por la paz en el país, y la mayor parte de sus sermones versaban sobre el bienestar de los ciudadanos de la nación afgana.
En junio del año pasado, un ataque suicida contra un encuentro de clérigos se cobró la vida de al menos cuatro personas.