Más de 2 millones de familias italianas, el 7,7% del total del país, terminó en 2020 en condición de «pobreza absoluta» a causa de la pandemia de coronavirus, según cifras oficiales que el presidente del instituto estadístico Istat, Gian Carlo Blangiardo, calificó como «preocupantes».
«Son datos preocupantes», planteó este viernes Blangiardo en declaraciones televisivas al presentar los números del año pasado, que reflejaron un aumento de las familias «en pobreza absoluta» del 6,4 % al 7 % en un año.
Según explicó el titular del Istat, «está claro que es un efecto de la pandemia y los efectos económicos y ocupacionales derivados».
De acuerdo a la definición del Istat, «el umbral de pobreza absoluta representa el valor monetario, a precios corrientes, de la canasta de bienes y servicios considerados esenciales para cada familia, definida en función de la edad de los integrantes, la distribución geográfica y el tipo de municipio de residencia».
Blangardo agregó además que 2020 cerró con una tasa de pobreza absoluta de 5,6 millones de personas, el 9,4% del total, en aumento frente al 7,7% de 2019.
«Es un problema importante que debe ser monitoreado y seguido», afirmó en diálogo con la cadena RaiNews, al agregar que se trata del número más alto desde 2005.
De todos modos, en línea con datos que mostraron una recuperación industrial en los primeros meses de 2021, el presidente del Istat confirmó que «hay una débil recuperación» a nivel económico, «con una señal reconfortante» de las proyecciones.
