El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, acusó este miércoles a Irán de continuar enriqueciendo de manera secreta uranio y advirtió que las sanciones de su país a la república islámica «pronto aumentarán, considerablemente», luego de que Teherán anunciara que sus reservas de uranio enriquecido excedían el límite establecido por el acuerdo de Viena de 2015.

La declaración de Trump en Twitter se produjo mientras el organismo de control nuclear de la ONU celebraba en Austria una reunión de emergencia por la violación de un acuerdo nuclear por parte de Teherán y en donde Estados Unidos instó a las potencias mundiales a rechazar la «extorsión nuclear» de Irán.

«Irán ha sido durante mucho tiempo ‘enriquecedor’ en secreto, en violación total del terrible acuerdo de 150 mil millones de dólares realizado por John Kerry y la Administración Obama. Recuerde que el acuerdo expirará en pocos años. Las sanciones pronto aumentarán, considerablemente!», afirmó el mandatario estadounidense en su cuenta de la red social.

En un clima de intensas tensiones, Irán anunció el lunes que ahora producirá al menos un 4,5% de uranio enriquecido, más allá del límite permitido por el acuerdo nuclear alcanzado en Viena en 2015 entre la república islámica y seis grandes potencias (Estados Unidos, Rusia, China, Francia, el Reino Unido y Alemania) con el objetivo de limitar el programa atómico iraní a cambio del levantamiento de las sanciones internacionales contra el país persa.

En mayo de 2018, Trump ordenó la salida de su país del acuerdo nuclear con Irán y volvió a imponer sobre la economía iraní todas las sanciones que había levantado con el pacto, incluidas las que pesan sobre el sector petrolero.

Las tensiones entre Estados Unidos e Irán aumentaron desde abril, a raíz del fin de las exenciones a la compra del petróleo iraní, la designación como extremistas de los Guardianes de la Revolución, el aumento de la presencia militar estadounidense en Medio Oriente y el ataque a buques cisterna y a un dron estadounidense en el Golfo Pérsico.

En respuesta a la retirada de Estados Unidos, Irán anunció que romperá gradualmente algunos de sus compromisos hasta que los otros socios en el acuerdo tomen las medidas que buscan para asegurar sus intereses.

Entretanto, en Viena, Estados Unidos instó hoy a las potencias mundiales que intentan preservar un acuerdo con Irán sobre su programa atómico a no ceder a la «extorsión nuclear» de Teherán, que violó las limitaciones del pacto en los últimos días en un intento por obtener beneficios para proporcionar incentivos económicos para compensar las sanciones estadounidenses.

La embajadora de Estados Unidos ante organizaciones internacionales en Viena, Jackie Wolcott, dijo a Irán que Washington estaba abierto a la «negociación sin condiciones previas» sobre un nuevo acuerdo nuclear y que «el único camino para el alivio de las sanciones es a través de tales negociaciones, no extorsión nuclear», informó la agencia de noticias EFE.

«Estamos comprometidos a negar a Irán los beneficios que busca de estas provocaciones más recientes», remarcó y señaló que «es imperativo que este mal comportamiento no sea recompensado, porque si lo es, las demandas y provocaciones de Irán solo aumentarán».

El delegado ruso Mikhail Ulyanov respondió con críticas a la administración Trump al señalar que «por alguna razón solo se refieren a Teherán, de hecho Estados Unidos se niega a cumplir con sus propias obligaciones en virtud del acuerdo nuclear. Por ese motivo perdieron cualquier derecho a exigir al resto».

En la misma línea se manifestó el presidente iraní, Hasan Rohani, criticó hoy la reunión del OIEA y recomendó a sus miembros que se preocupen por las políticas de Estados Unidos.

«No es necesario que estén preocupados por Irán, su preocupación debe ser por Estados Unidos, que ha pisoteado el acuerdo nuclear firmado en 2015 y ha socavado todos los compromisos internacionales», dijo Rohani en la reunión semanal del gabinete, según consignó la agencia iraní de noticias IRNA.

La convocatoria de la sesión por Estados Unidos es «una historia que provoca risa», sostuvo Rohani, antes de recordar que los estadounidenses se retiraron del acuerdo nuclear el año pasado y volvieron a imponer sanciones a Irán.