Un nuevo terremoto de magnitud 5,6 en el este de Turquía produjo la muerte de una persona y dejó decenas de heridos. La zona ya había sido golpeada por un intenso temblor a inicios de mes, que culminó con más de 44.000 muertos y un gran número de edificios dañados.

La agencia pública de gestión de catástrofes comunicó que el epicentro del temblor fue localizado en el distrito de Yesilyurt, en la provincia de Malatya, azotada anteriormente por un violento sismo el 6 de febrero, que terminó con más de 44.000 víctimas fatales en Turquía y miles de fallecidos en la vecina Siria.

«Un ciudadano perdió su vida. Unos 69 quedaron heridos», informó a través de la televisión Yunus Sezer, responsable de la Autoridad de Gestión de Desastres y Emergencias (AFAD), según consignó la agencia de noticias AFP.

En esa línea, detalló que varios edificios ya dañados por el sismo de principios de febrero colapsaron este lunes con la nueva réplica.

En el mismo marco, el alcalde de la ciudad de Yesilyurt indicó en la televisión Habertürk que un padre y su hija, que habían regresado a su casa para recuperar algunos objetos personales, se encontraban entre los escombros de un edificio derrumbado. Los rescatistas pudieron finalmente sacarlos.

Las autoridades turcas iniciaron una investigación por el desplome de miles de inmuebles que causaron decenas de miles de muertes y dejaron sin casa a millones de personas.

Destrozos millonarios

El terremoto que sacudió el 6 de febrero el sur de Turquía y sus réplicas posteriores, que dejaron más de 44.000 muertos, generaron daños materiales por más de 34.000 millones de dólares y los costos para la reconstrucción se calcula que podrían ser «el doble», estimó hoy el Banco Mundial (BM).

La institución financiera aclaró que la estimación de los 34.000 millones de dólares es un monto equivalente al 4% del PIB de ese país en 2021 y no toma en cuenta el costo de la reconstrucción, que se calcula «potencialmente el doble» ni las consecuencias para el crecimiento de Turquía, informaron en un comunicado.

«Este desastre nos recuerda que Turquía se encuentra en un área de alta actividad sísmica y que es necesario fortalecer la resiliencia de la infraestructura pública y privada. El Banco Mundial se compromete a apoyar los esfuerzos turcos en esa dirección», señaló el director del organismo, Humberto López, en el comunicado, reproducido por AFP.

Esta estimación solamente abarca a Turquía y no tiene en cuenta los daños causados por ese sismo en el norte de Siria, una zona especialmente afectada por los terremotos.

La última réplica tuvo lugar en la madrugada del lunes en la provincia de Malatya, ubicada al sureste de Turquía, lo cual dejó un muerto y decenas de heridos.

El BM indicó que las réplicas, que continúan, amenazan con aumentar los daños y que las estimaciones sobre su impacto aún están en curso.

Según la AFAD, la agencia pública turca de gestión de desastres, se registraron unas 10.000 réplicas desde el 6 de febrero, cuando un terremoto de magnitud 7,8 destruyó o dañó severamente más de 170.000 edificios en once provincias del país y afectó también al norte de Siria.

En total, los temblores dejaron más de 44.000 muertos en el sur y sureste del país, según el último informe oficial.

Las provincias turcas afectadas, entre las más pobres del país, también acogieron a más de 1,7 millones de refugiados sirios, dijo el BM.