Una nueva versión del Ciclón Bomba azota sin piedad la zona de California en Estados Unidos y ya provocó al menos dos muertes en medio de intensas lluvias y fuertes ráfagas de viento que superaron los 130 kilómetros por hora.

Residentes en el sur California esperan que la poderosa tormenta originada en el Océano Pacífico alcance su punto máximo este jueves, que entre otros desastres ya produjo que varias poblaciones se hayan quedado sin electricidad.

El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) advirtió este miércoles que podría haber “inundaciones generalizadas, carreteras arrasadas, laderas colapsadas, árboles caídos, cortes de energía generalizados, interrupción inmediata del comercio y, lo peor de todo, la probable pérdida de vidas humanas”.

Según consignó la cadena FOX de California, un niño murió en el condado de Sonoma después de que un árbol cayó sobre la casa de familia y una joven de 19 años falleció después que su automóvil perdiera su adherencia a la ruta tras hidroplanear al paso del agua estancada.

En tanto, el gobernador Gavin Newson declaró el estado de emergencia, mientras numerosas alertas meteorológicas entraron en vigencia este jueves, incluyendo una advertencia de tormenta de invierno y una de viento potentes.

Además, los funcionarios ordenaron advertencias de evacuación para los residentes en las áreas afectadas de Bobcat y Fish Fire como precaución debido a posibles inundaciones y flujos de lodo y escombros.