El ex presidente de Angola, José Eduardo dos Santos, murió este viernes en a los 79 años después de estar internado en la clínica Tecknon  de Barcelona desde hacía varias semanas.

Después de dar la noticia del deceso de Dos Santos, desde la presidencia remarcaron que «gobernó con claridad y humanismo el destino de la nación angoleña durante años muy difíciles».

Mientras se decretaron cinco días de duelo nacional a partir del sábado para honrar su memoria, la familia del ex primer mandatario sospecha sobre las circunstancias en las que se produjo el deceso.

Hace cinco días la hija del fallecido, Tchizé dos Santos, denunció ante los Mossos d’Esquadra un complot para acabar con la vida de su padre y pidió protección. Tras conocerse su fallecimiento, Tchizé instó a que el cuerpo del ex presidente sea preservado y que no sea entregado hasta que se realice la autopsia oportuna, ante el temor de que pueda ser trasladado a Angola, informó El Mundo de España.

La denuncia fue por los presuntos delitos de tentativa de homicidio, omisión del deber de socorro, lesiones por imprudencia grave y revelación de secretos por parte de personas de su entorno. La familia está representada por los despachos Carmen Varela Abogados de Familia y Molins Defensa Penal.

Dos Santos gobernó Angola entre 1979 y 2017 y fue uno de los dirigentes africanos que permaneció durante más tiempo en el poder, aunque su mandato estuvo marcado por casos de corrupción.