Un niño de 11 meses fue hallado con vida, en medio del barro, rodeado de palos y piedras, luego del alud que arrasó con el poblado de Salgar, en Antioquía, Colombia.
El pequeño, que habitaba en la zona de la Escuela Vieja de Salgar, fue arrastrado junto a su familia y la vivienda completa, por la corriente, durante la avalancha ocurrida al desbordarse la quebrada La Liboriana.
Dióser Días, se encontraba inconciente y con hipotermia, boca abajo en el lodo, a poco más de dos kilómetros de dónde encontraba su vivienda, y es uno de los pocos sobrevivientes de un grupo familiar que ya suma 12 personas desaparecidas. Fue trasladado al Hospital de Ciudad Bolívar y posteriormente a Medellín. Ya recuperado, quedó bajo la custodia de su abuela paterna.
El milagro del pequeño Dióser se presenta como un rayo de esperanza iluminando una desgracia de la que todavía no se puede hablar en números definitivos
La tragedia colombiana tiene, hasta el momento, un saldo de 78 muertos, alrededor de 37 heridos y una cantidad no contabilizada aún de desaparecidos, y se inscribe en una de las mayores catástrofes ocurridas en ese país en los últimos años.
