El presidente de México, Enrique Peña Nieto, y el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, afianzaron el vínculo comercial bilateral con la firma de nuevos acuerdos y dejaron atrás la polémica suscitada en enero por el apoyo del premier israelí al muro fronterizo propuesto por el mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, un asunto que ignoraron durante su encuentro en la capital mexicana.

«Tenemos una relación sólida, que va en ruta creciente y en todo ello buscando prosperidad y desarrollo para nuestras sociedades», dijo el mandatario mexicano tras la reunión en la residencia oficial de Los Pinos, en la Ciudad de México.

Peña Nieto agradeció a Netanyahu su visita a México, la primera realizada por un primer ministro israelí al país norteamericano, pese a ser considerado un aliado de Israel desde el inicio de sus relaciones diplomáticas hace 65 años. «Tenemos que modernizar nuestro tratado de libre comercio», dijo Netanyahu en referencia al pacto vigente desde el 2000, el único de Israel en América latina, y que hoy no contiene capítulo ni de servicios ni de inversiones.

Israel es el primer socio e inversionista de México en Medio Oriente, mientras existen más de 150 empresas israelíes en México, país que alberga la tercera comunidad judía más numerosa del continente latinoamericano.

Según datos oficiales, hay 67.000 judíos en México, de los cuales 70% son empleadores. Durante la visita de Netanyahu, ambos países fortalecieron su relación económica con la firma de tres acuerdos de cooperación: uno en temas de agua, agricultura, emprendimiento e innovación; otro sobre servicios aéreos y un tercero en materia exploración del espacio ultraterrestre con fines pacíficos, reportó la agencia de noticias DPA.

Pero ni Netanyahu ni Peña Nieto hicieron referencia al polémico tuit de enero pasado del primer ministro israelí, que causó un cruce diplomático entre ambos países.

“El presidente Trump tiene razón. Construí un muro en la frontera meridional de Israel (la que separa al país de Egipto). Detuvo toda la inmigración ilegal. Gran éxito. Gran idea”, escribió el primer ministro israelí días después de la asunción de Trump.

La cancillería de México manifestó entonces su “extrañeza, rechazo y decepción” por el comentario de Netanyahu y señaló que el país era un socio de Israel y debía “ser tratado como tal”.