El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, resultó reelecto en las elecciones de en Venezuela con un total de 5.823.728 votos que representan el 68 % de las preferencias, sobre los más de 8.600.000 sufragios válidos emitidos, informó durante las últimas horas de este domingo la presidenta de la oficialista Asamblea Nacional Constituyente (ANC) de Venezuela, Delcy Rodríguez.

En segundo lugar se ubicó el ex chavista Henri Falcón con el 21,2 % de los votos, quien consideró que las elecciones carecían de legitimidad por acusar al gobierno de “compra de votos” y “chantaje” con programas sociales.

Te puede interesar: Venezolanos en Argentina se manifiestan a favor y en contra de las elecciones en Venezuela

Según indicó María Isabel Sánchez de la agencia Noticias Argentinas, “Venezuela se enfrenta a la amenaza de nuevas sanciones internacionales y al recrudecimiento de la crisis social y económica, tras la cuestionada reelección del presidente Nicolás Maduro hasta 2025 en unos comicios desconocidos por la oposición y varios gobiernos”.

“Aunque celebró haber ganado por ‘nocaut’, el mandatario se reeligió con un abstención histórica del 52%, después del boicot al que llamó la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) por considerar la elección una «farsa» para perpetuarlo en el poder.

Más adelante, Sánchez describió: “El panorama es sombrío para un país aislado y arruinado, con una población que soporta la falta de comida y medicinas, un alto costo de vida con un ingreso mínimo que solo da para medio kilo de carne, y el éxodo de cientos de miles”.

“Venezuela sufre la peor crisis de su historia reciente: El FMI estima la caída del PIB en 15% y la hiperinflación en 13.800% para 2018. Su producción de crudo cayó al peor nivel en 30 años” razón por la cual «los escenarios están cantados: tensión política, radicalización de las partes, represión, desconocimiento internacional masivo, agudización de las sanciones y clímax de la crisis económica», opinó a su turno el analista Luis Vicente León.

En tanto, el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo señaló que «la farsa de las elecciones no cambia nada».

Por su parte, el experto en comunicación política Andrés Cañizales, manifestó que «un nuevo gobierno, considerado ilegítimo, no tendrá capacidad de maniobra ni en finanzas internacionales ni en diplomacia».

«Falcón no logró ni ganarle a Maduro ni a la MUD. Su desconocimiento de la elección es tardío. Vendrán las recriminaciones mutuas, los intentos por capitalizar la abstención», aseguró a la AFP el politólogo Luis Salamanca.

Para Salmanca y León, el gran desafío de la oposición es reunificarse en torno a «una estrategia» que presione por cambios tras casi dos décadas de chavismo.

León anota, por otra parte, que la «implosión» representa el «mayor riesgo» de Maduro, si cada vez más funcionarios se sienten acorralados por las sanciones internacionales.

Casi todo el círculo del gobernante está sancionado por la UE y Washington, que recién sumó al número dos del chavismo, Diosdado Cabello, a su lista de 70 autoridades venezolanas sancionadas – incluido Maduro-.

Maduro cuenta con la cúpula de la Fuerza Armada, pero la crisis es tan severa que puede provocar o una fricción dentro de la alianza cívico-militar gobernante o una ruptura social de mayor escala», advirtió Crisis Group.

El analista Benigno Alarcón considera que, cercado, el gobierno podría acelerar el camino a un sistema de partido único como el de Cuba.

En tanto, las pequeñas protestas por falta de agua, luz, alimentos y medicinas se multiplicarán, estima Diego Moya-Ocampos, del IHS Markit (Londres), llevando al gobierno a recurrir a la «represión».