Por Elisa Soldano
El vecino país de Chile está atravesando días convulsionados, debido a que el pueblo salió a las calles a denunciar la concentración de la riqueza en un sector muy reducido de la sociedad y a pedir un cambio en el sistema del país, para garantizar el igual acceso a derechos básicos como educación, salud y pensiones.
Como respuesta a estas movilizaciones, el gobierno chileno, liderado por Sebastián Piñera, ordenó a las fuerzas de seguridad del país -con predominio de los carabineros- a reprimir las manifestaciones.
Conclusión dialogó con la dirigente estudiantil Valentina Miranda, de 19 años, quien al momento del contacto estaba afectada por gases lacrimógenos lanzados por carabineros durante una manifestación.
«Las movilizaciones no han parado desde hace casi quince días. Los jóvenes están en la calle sin miedo, con los carabineros reprimiendo con gases, pero todo el mundo en la calle«, explicó Miranda.
El pueblo se expresa y carabineros reprime
La líder estudiantil sufrió en carne propia las represiones de las fuerzas de seguridad chilenas, ya que el viernes 19 de octubre, cuando explotó la revuelta social, una bomba lacrimógena le pegó en el hombro izquierdo y al día siguiente un proyectil impactó en la zona de su nuca.
«El día domingo fuimos perseguidos por carabineros de civil por la Alameda, y el día martes nos detienen ilegalmente durante el toque de queda. Nos desalojaron de un recinto privado en el cual nos alojábamos por seguridad, aparecieron los carabineros en este lugar y nos detuvieron. Nos arrastraron hacia la calle, a mí me arrojan gas pimienta en la cara y nos llevaron detenidos«, relató la joven.
Además, indicó que la detención se produjo cerca de las 21.30 y su liberación se produjo tres horas después.
Violencia estatal
Consultada sobre la cantidad de personas desaparecidas, Miranda indicó que al Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) -organismo que lleva este registro- le está costando recopilar información sobre los detenidos.
«Se acabó el toque de queda y carabineros no ha querido soltar los documentos de los sumarios y de las detenciones, por lo que ha sido súper difícil constatar quienes están desaparecidos y quienes no«, señaló.
Y agregó: «Había mucha gente que estaba desaparecida y que apareció el día lunes o el domingo, pero aún no se sabe la cifra real de detenidos y desaparecidos. Carabineros no deja el ingreso de familias a las comisarías y tampoco dan información real con respecto a las detenciones de las personas«.
Sobre las mujeres que sufrieron violencia de género por parte de las fuerzas de seguridad chilenas, la referente estudiantil indicó a este medio que «ha habido violaciones» y que «hay más de 10 casos, no solamente de mujeres, sino también de las minorías homosexuales». En este sentido, dijo que hasta el momento se conocen 11 denuncias por violación y más de 20 por acoso sexual por parte de la policía.
Al respecto, expresó: «El lunes un compañero denunció que carabineros lo violó arriba de un camión policial, por el simple hecho de ser gay. Y hay muchas compañeras que también han denunciado violaciones. A una compañera la amenazaron con violarla con una pistola. También hay muchas denuncias por acoso sexual, las obligan a desnudarse adentro de los calabozos, a hacer sentadillas».
Piñera y un cambio inútil
En relación al cambio de gabinete que anunció Piñera días atrás, Miranda indicó que «no pasa por un cambio de gabinete, pasa por un sistema opresor que finalmente termina precarizando y haciendo que el costo de la vida sea cada día más alto mientras el sueldo de las personas más vulnerables no sube».
«Lo que intentó hacer el gobierno fue descomprimir un poco el tema de las movilizaciones y poder decir que hicieron el cambio de gabinete porque la ciudadanía lo pidió y esto va a venir a solucionar los problemas», analizó.
Sobre el tema, la joven denunció que Sebastián Piñera había pactado con tres cúpulas políticas que se hicieron pasar por representantes del pueblo y sellaron un acuerdo que pasaba más plata del Estado a manos de los privados, para que desde este sector sigan financiando derechos básicos como la educación, la salud, el transporte y las pensiones.
«A través de la Asamblea Constituyente se tiene que cambiar completamente el sistema, y no tiene que ser un cambio solamente institucional, sino que los movimientos sociales tenemos que ser capaces de reconstruir el tejido social que se ha venido rompiendo desde la dictadura», advirtió la estudiante.
«Se conocieron documentos de unas 80 páginas donde carabineros apuntaban a los movimientos sociales como culpables de esta revuelta social. Y la estrategia que iban a impulsar era perseguir a esos movimientos. El gobierno va a seguir teniendo el mismo criterio mientras la gente se siga manifestando contra ellos, porque son dueños de la mitad de Chile, entonces les afecta de manera directa que el pueblo pida que se vayan«, concluyó Valentina Miranda.
