La Unión Europea y Japón firmaron un histórico acuerdo comercial, que representa la tercera parte del PIB global, con el fin de eludir las medidas proteccionistas de Trump. El acuerdo parece contar con la bendición de China, cuyos medios lo han saludado con entusiasmo, mientras EE.UU. se pone a la defensiva.

El acuerdo de Japón y la Unión Europea otorga un «acceso inédito de los productos agrícolas europeos al mercado nipón», a cambio del levantamiento progresivo de derechos de aduana sobre los vehículos y sus repuestos de Tokio.

Es la segunda vez que Japón se rebela contra Trump: primero al recoger los detritos de la Asociación Transpacífico (TPP, por sus siglas en inglés) y ahora mediante su temeraria alianza comercial con Europa y, en forma subrepticia y triangulada, con China.

Mientras Xi Jinping emprende una gira por cinco países árabes y africanos para promover la Ruta de la Seda, en escala a la relevante cumbre de los BRICS en Sudáfrica, The New York Times, connotado rotativo anti-Trump, publicó un artículo titulado ‘Europa y Asia se mueven para apuntalar los sistemas globales que el mandatario estadounidense ha atacado’, después de que el presidente de EEUU había catalogado a la Unión Europea de «enemiga» en una entrevista con CBS.

The New York Times expone que el mismo día de la Cumbre de Helsinki, al otro lado del mundo, en Pekín, «los líderes de la Unión Europea y China» proclamaron una «declaración conjunta y un compromiso común para mantener vigoroso el sistema global» después de dos años de interminables negociaciones. Agrega que al día siguiente «los europeos viajaron a Japón y firmaron el mayor acuerdo de libre comercio de la historia». La Comisión

Europea asestó a Google, una de las principales joyas tecnológicas de EEUU, una de las mayores multas de la historia por 5.000 millones de dólares por sus prácticas monopólicas.

El atribulado presidente Trump amenazó con impuestos devastadores a la industria automotriz de la Unión Europea y arremetió contra la multa a Google en un tuit feroz en el que condenó a Europa de «tomar ventajas de EEUU», pero «por no largo tiempo».

​Según The New York Times, además de la multa a Google, «la Unión Europea prepara enormes tarifas para contrarrestar las tarifas automotrices de Trump basadas en ‘seguridad nacional’, un asunto importante para Alemania».

La Unión Europea y Japón firmaron un histórico acuerdo comercial, que representa la tercera parte del PIB global, con el fin de eludir las medidas proteccionistas de Trump. El acuerdo parece contar con la bendición de China, cuyos medios lo han saludado con entusiasmo, mientras EEUU se pone a la defensiva.