Los Chalecos Amarillos continuaron este fin de semana sus protestas contra las políticas liberales del presidente de Francia, Emmanuel Macron, mientras en eMontceau-les-Mines, en la región occidental de Borgoña, en el distrito de Chalon-sur-Saône, realizaron su «Asamblea de Asambleas». Todo, desafiando la ola de calor que castiga al país.

De esta manera, los chalecos amarillos cumplieron la semana número 33 de protestas ininterrumpidas en un escenario que promete mantenerse ante la falta de respuesta a sus reclamos.

En la «Asamblea de Asambleas», con la asistencia de representantes de varias regiones del país, se buscó nuevas estrategias para proseguir con el movimiento y revitalizar las protestas sociales que buscan discutir el futuro social.

Este fin de semana la procesión parisina marchó desde la puerta de Clichy hasta la puerta de Pantin a través de Barbès y se registraron percances con la policía que lanzó gases lacrimógeno contra los manifestantes.

https://twitter.com/GJ_JACK_/status/1145640473945681920

Miles de chalecos amarillos desafiaron la intensa ola de calor que se registra en Francia, en el marco de las temporada de altas temperaturas que afecta a Europa, en particular en la ciudad capital, París, y la presencia de la policía.

También se registraron movilizaciones en Burdeos, Toulouse, y Montpellier, ciudades donde acudieron cientos de personas.

Ante el declive de las movilizaciones, atribuidas en parte a la represión policial, los líderes de chalecos amarillos esperan dar nueva vida al movimiento.

«La gente está esperando más», le dijo a LeMonde Sylvia Fischbach, de 35 años, una cajera administrativa en Forbach, Mosell.

El sábado pasado fueron 11.800 participantes en toda Francia, según cifras del Ministerio del Interior, 25.553 según el «Número Amarillo».

Para reactivar el movimiento, varias figuras de chalecos amarillos anunciaron la semana pasada la creación de una «base común , un cuerpo poderoso de protesta colectiva, para defender los intereses de los ciudadanos y la propiedad común de todos (bienes públicos, servicios públicos y medio ambiente).

También elaboraron un programa de su movilización hasta el 17 de noviembre de 2019, un año después del nacimiento del movimiento.