Este domingo, en medio de la consumación de un golpe de Estado contra Evo Morales en Bolivia, sectores de la Iglesia se expresaron del lado contrario al presidente, instándolo a renunciar a su cargo “para pacificar al país”.

El Obispo de la Diócesis de Potosí, Monseñor Ricardo Centellas, publicó ayer una “carta abierta al señor presidente de Bolivia”, en la que expresó su “apoyo incondicional a la democracia, a toda la protesta cívica por un nuevo orden constitucional” y a una “refundación de la república de Bolivia” y pidió a Morales que abandone su puesto, “asuma la responsabilidad”,  y “no siga provocando mayor incertidumbre”.

“Nuestro apoyo incondicional a la democracia, a toda la protesta cívica por un nuevo orden constitucional y refundación de la república de Bolivia sobre nuevas bases de verdadera solidaridad y colaboración entre todos los bolivianos, de acuerdo al reclamo incesante de la gran mayoría de nuestra gente. Muestre su respeto por Bolivia y por Potosí, renuncie para pacificar el país y asuma su responsabilidad por el fraude electoral y no siga provocando mayor incertidumbre. Mi oración por la recuperación de todos los heridos y a sus familias nuestra cercanía y solidaridad. Somos servidores y sembradores de la vida y no de la muerte”, expresaron en la misiva.

A continuación, el texto completo:

CARTA ABIERTA AL SEÑOR PRESIDENTE DE BOLIVIA

Felices los que trabajan por la paz, porque serán reconocidos como hijos de Dios, Mt 5,9.

Hoy es aniversario de Potosí y esta noble población, lo único que recibe en su aniversario es ataques criminales en una emboscada cobarde a las delegaciones de Potosí y Sucre, ayer en Vila Vila y hoy en Huancarani, inmediaciones de Challapata.

Detestamos las actitudes de confrontar a la población boliviana y las de sus colaboradores que siembran terrorismo de Estado. Basta ya de violencia y de dobles discursos, invitando a la pacificación y convocando a la violencia que generan enfrentamientos entre bolivianos.

Queremos vivir en paz, respetando la ley y la vida de todos los bolivianos. Potosí está parado por más de un mes, el resto del país 19 días en fuerte conflicto social y usted parecería que no lee esta realidad boliviana.

Gobernar escuchando al pueblo, es pacificar, pero al primer día de conflicto y no después de tanto tiempo de indiferencia.

Nuestro amor por la vida nos compromete a defender la integridad del pueblo, respetando la vida y el bienestar de todos. No podemos aceptar el crecimiento de la violencia para que siga sufriendo nuestro pueblo, especialmente los más pobres.

Nuestro apoyo incondicional a la democracia, a toda la protesta cívica por un nuevo orden constitucional y refundación de la república de Bolivia sobre nuevas bases de verdadera solidaridad y colaboración entre todos los bolivianos, de acuerdo al reclamo incesante de la gran mayoría de nuestra gente.

Muestre su respeto por Bolivia y por Potosí, renuncie para pacificar el país y asuma su responsabilidad por el fraude electoral y no siga provocando mayor incertidumbre.

Mi oración por la recuperación de todos los heridos y a sus familias nuestra cercanía y solidaridad.

Somos servidores y sembradores de la vida y no de la muerte.

Noviembre 2019

Ricardo Centellas Guzmán Obispo de Potosí.