El presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, renunció hoy al cargo jaqueado por denuncias de corrupción y por el Congreso, que por segunda vez en tres meses iba a votar mañana una moción para destituirlo, y será sucedido por su primer vicepresidente, Martín Vizcarra, tras un acuerdo entre los jefes de los bloques parlamentarios.

En un mensaje televisado, Kuczysnki -quien seguirá formalmente a cargo del gobierno hasta que el Congreso acepte su renuncia- fundó su decisión en el “clima de ingobernabilidad” que “no permite avanzar” al país, subrayó que “esta crisis ha sido generada por actos políticos subjetivos” y aseguró que “habrá una transición constitucionalmente ordenada”.

La aceptación de la renuncia del mandatario y la designación de su sucesor deberán ser aprobadas por el plenario del Congreso unicameral, que mañana se reunirá con ese objeto a partir de las 16 (las 18 en la Argentina).

El presidente del Congreso, el opositor Luis Galarreta, informó esta noche que la Junta de Portavoces (jefes de bancada) acordó aceptar la dimisión del mandatario y que él se comunicó con representantes de Vizcarra, quien se manifestó dispuesto a asumir la jefatura del Estado y jurará el viernes.