La Justicia de Irak condenó este domingo a dos franceses a la pena de muerte por haber sido parte del Estado Islámico (EI), lo que eleva a nueve los ciudadanos de esa potencia europea que esperan una ejecución en ese país tras cuestionados juicios.

En total, Irak ya condenó a más de 500 sospechosos de haber pertenecido al EI, la mayoría a pena de muerte o cadena perpetua. Sin embargo, hasta ahora ninguno de los ciudadanos extranjeros condenado ha sido ejecutado.

Los últimos dos condenados franceses son Fodil Tahar Aouidate y Vianney Ouraghi, dos hombres que junto a otros nueve extranjeros fueron entregados al gobierno iraquí por las milicias kurdas-sirias que, con el apoyo de Estados Unidos, fueron la primera línea de combate frente al EI en el país vecino.

Como otros detenidos antes, Aouidate, de 32 años, denunció ante la corte que lo terminó condenando que había sido torturado y solo por eso había confesado haber peleado en el EI. Según afirmó, había trabajado con la milicia islamista, pero nunca había tomado las armas.

El juez del caso pidió una pericia médica y ésta concluyó -como todas las veces anteriores- que no había señales de tortura, informó la cadena de noticias France24.
Poco días después, Aouidate y Ouragui fueron condenados.

La ley iraquí sostiene que toda persona que es o fue parte de un grupo terrorista, aún si no participó activamente en la lucha armada, puede ser condenado a muerte.

La organización Human Rights Watch acusó el viernes pasado a las autoridades iraquíes de «usar un abanico de técnicas de torturas que no dejan marcas duraderas en el cuerpo de una persona» y, además, repudió al gobierno francés por «terciarizar» los juicios a los sospechosos de pertenecer al EI con «sistemas de justicia abusivos», como el iraquí.

En medio de crecientes críticas, la vocera del gobierno francés, Sibeth Ndiaye, aseguró que funcionarios de primera línea están actuando.

«La posición de Francia ha sido constante…Ni bien uno de nuestros ciudadanos en el mundo enfrenta la posibilidad de una sentencia de muerte después de una condena, nosotros intervenimos a nivel de las máximas autoridades», aseguró Ndiaye en diálogo con el canal de televisión francés Europe 1.