La policía francesa liberó a dos rehenes y detuvo al hombre que se había atrincherado esta mañana en una oficina de correos de Colombes, un suburbio al noroeste de París, en medio de una paranoia generalizada tras el atentado de la semana pasada contra Charlie Hebdo.

«Nada permite relacionar este hecho con los atentados de la semana pasada», aseguró la Policía en relación a la serie de ataques que se cobraron la vida de 17 personas.

Según la radio RTL, alrededor de las 12 GMT (9 de Argentina), el autor del asalto ingresó a la oficina de correo de Colombes armado con un rifle Kalashnikov, una pistola y granadas, tomó rehenes y llamó a la policía. «Nos llamó profiriendo propósitos totalmente confusos», explicó una fuente policial.

Las fuerzas de seguridad acordonaron la zona de Charles de Gaulle boulevard donde se encuentra la oficina de correos y negociaron con el agresor para poder liberar a los rehenes, algunos de los cuales habían logrado huir por sus propios medios.

Los medios franceses informaron que el mismo asaltante, que tiene antecedentes por delitos menores, también pidió una ambulancia.